“La CTA se partió, se fragmentó pero a espaldas de los trabajadores. Una parte responde al yaskismo. Otra parte puso todas las expectativas en el binnerismo que también muestra sus límites. Sin embargo, ninguna de las dos pueden hacer frente al ajuste de los gobiernos nacional y provincial que están proponiendo que la crisis la paguen los trabajadores, a costa de la inflación. Eso es resistido por las bases de gremios y sindicatos, como el de docentes”. Así lo denunció María Elena Molina, candidata a secretaria general de la conducción nacional de la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA), que lidera Pablo Micheli y que tendrá sus elecciones el próximo jueves 29, en todo el territorio nacional.
La dirigente de la Lista 3 dialogó con El Ciudadano acompañada de Miguel Osuna, candidato a secretario general de la misma lista en la seccional Rosario, y de Alicia Escudero, del mismo grupo sindical.
La mujer que disputa el cargo de Micheli, comentó los buenos ejemplos de lucha sindical que se vienen dando en el país. Para ella, la pelea de los docentes bonaerenses trascendió a la dirigencia de Roberto Baradel en Suteba, porque ya se venía gestando desde hace tiempo y le impuso la estrategia de lucha a esa dirigencia sindical. Molina también puso como ejemplo el conflicto docente en Salta.
“En Salta también se dio un proceso similar. Allí, los compañeros docentes tuvieron en claro nuestro proyectos y métodos que fueron resueltos en asambleas. De esa manera fue que los docentes salteños lograron ganar. Además, porque en Salta, los dirigentes y trabajadores mostraron una independencia política tanto del gobierno salteño como del nacional. También, en esa huelga, los docentes contaron con el apoyo incondicional de los legisladores del Partido Obrero que pusieron las bancas al servicio de los trabajadores. Es por eso que quieren sancionar a Claudio del Plá. La huelga triunfó y eso fue un detonante para la situación de este legislador”, señaló.
En ese sentido, Molina expresó: “Vemos que en muchas huelgas el reclamo supera a las pretensiones de las direcciones gremiales. Nuestra Coordinadora Sindical Clasista es una alternativa contra el ajuste. Los gremios que quieren encubrir su relación con los gobiernos y eso los limita en su accionar. La Coordinadora Sindical Clasista va ganando simpatías en muchos lugares. Tenemos muchos dirigentes que se van a presentar a lo largo del país. En Mendoza, Santa Cruz y Neuquén, tenemos amplias posibilidades de ganar las direcciones provinciales de la CTA. Es por esto que invitamos a los compañeros a votarnos”.
En tanto, Osuna denunció que “en Santa Fe van las listas 1, 3 y 7. Sin embargo y a pesar de fraguar una estrategia, los que integran las listas 1 y 7 son los mismos a nivel nacional. Están haciendo una maniobra, que es la de seguir al moyanismo, por ejemplo”. El dirigente de Amsafé también expresó: “Somos parte del activismo que recuperó Amsafé Rosario hace 10 años de manos de la burocracia Celeste provincial de Sonia Alesso”. “Nosotros continuamos con nuestro programa que es reclamar el salario igual a la canasta familiar, el 82 por ciento para los jubilados y la prohibición de despidos o suspensiones”, fueron por último, las propuestas de Osuna.
En tanto, para la dirigente que milita en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Alicia Escudero “una cuestión fundamental es el salario. Todas las paritarias fueron frenadas o cerraron a la baja. También, los aumentos se dieron en cuotas que no alcanzan a absorber a la inflación”. Además, la delegada de ATE apuntó a que “la CTA en Rosario trabaja sobre hechos consumados. Se moviliza pero se acepta lo de las paritarias”, mientras propone pelear “para que la CTA sea una herramienta efectiva. Muchas luchas parciales que surgen de manera autónoma, por interés de las bases, son retomadas por las dirigencias pero no hay una dirección, una estrategia general para esas inquietudes”.
“Nos oponemos a los aplaudidores y patotas”, dijo Terés
“Nosotros vamos a estas elecciones en el marco de la historia de estos últimos cuatro años, que fueron de lucha y de independencia de gobiernos y partidos políticos”, expresó Gustavo Terés, más conocido como “Tero”, quien se candidatea como delegado regional en las elecciones de la CTA liderada por Pablo Micheli, para el próximo jueves 29 de mayo.
En ese sentido, Terés afirma que “el gran desafío es organizar contingentes de trabajadores para enfrentar el ajuste”. “No somos una organización sindical que plantea el diálogo y la negociación frente a los aplazos de las políticas laborales. Nos oponemos a los aplaudidores y patotas que contrarrestan la pelea de los trabajadores”, señaló.
Profesor de Educación Física, Gustavo Terés transita su tercer mandato como delegado seccional del gremio docente, Amsafé Rosario, y va por su reelección como secretario general de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Regional Rosario. Para ese objetivo es acompañado por Raúl Daz, un trabajador de Pami, a la vez que secretario adjunto de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE). Terés encabeza la Lista 7 regional para las elecciones de la CTA del 29 de mayo, formando parte de la construcción que impulsa la Lista 1 a nivel provincial con Gustavo Martínez a la cabeza y a Pablo Micheli a nivel nacional. “La CTA Rosario es una confluencia de sectores clasistas que da pelea por conquistas para los trabajadores”, señala Terés en una entrevista con El Ciudadano, y afirma: “Nosotros continuamos en un camino de autonomía tanto del Estado, como de los patrones y también, de los partidos políticos”. Además, Terés rechaza las acusaciones que lo relacionan con Hermes Binner y señaló que quienes los acusan “no pueden encontrar un gesto de que nos encuentren al lado de ningún gobierno. Nosotros hacemos un ejercicio a fondo de autonomía de todos los partidos políticos. En la calle avanzamos con todos los sectores que van contra el ajuste, por la defensa del pueblo trabajador. Esta central incomodó a los gobiernos municipal, provincial y nacional”.
Además, Terés no quiso dejar de destacar el compromiso de su organización con las problemáticas de género y con la defensa de los derechos humanos, entre otras cuestiones: “Esta es una central que favorece el trabajo de género con la incorporación de mujeres. Porque trabajamos también de manera continua en defensa de los derechos humanos acompañando los juicios contra los ex represores y en la defensa permanente de todos los derechos violentados que, en este momento de los pueblos originarios, contra la ley de protesta social y otras normas que vulneran los derechos obreros”.
Para Terés, existen desafíos que las organizaciones sindicales deben tomar y apuntó contra el denominado “trabajo en negro”, trabajo no registrado. Por último, el dirigente de Amsafé expresó que su programa “está en contra de las políticas de ajuste, contra la devaluación y contra las paritarias a la baja”, y que trabajarán “en la defensa del salario vital y móvil y el 82 por ciento móvil por el que estamos trabajando en una ley. Una asignación realmente universal por 640 pesos”, además aclaró que repudian “el mal llamado impuesto a las Ganancias”.
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