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MÁXIMA CUSTODIA EN JUJUY

Milagro Sala: “Los genocidas no tienen tanta seguridad”

La jefa de la Tupac Amaru cuestionó el complejo operativo de vigilancia montado alrededor de su casa del barrio El Carmen, en Jujuy, donde cumple prisión domiciliaria. La dirigente social mencionó que lo que más la "asombró" de su nueva residencia es "la cantidad de cámaras" instaladas alrededor del predio.


La jefa de la Tupac Amaru, Milagro Sala, cuestionó hoy el complejo operativo de vigilancia montado alrededor de su casa del barrio El Carmenem Jujuy, donde cumple prisión domiciliaria, y al respecto apuntó que “los genocidas no tienen tanta seguridad”.

“Los genocidas no tienen tanta seguridad. No tienen Gendarmería. No tienen tantas cámaras como yo tengo en la puerta de la casa. Lo que están haciendo es una violación a mis derechos”, criticó Sala, quien fue trasladada el jueves pasado al inmueble de su propiedad tras pasar más de 19 meses en el penal de mujeres de Alto Comedero.

En declaraciones a Radio 10, la dirigente social mencionó que lo que más la “asombró” de su nueva residencia es “la cantidad de cámaras” instaladas alrededor del predio.

“En la parte de adelante hay cuatro cámaras, un camión de Gendarmería, la policía de Jujuy al lado. Dos fuerzas custodiando para que no me fugue. Hay 11 cámaras en total. Hay dos gendarmes en cada esquina de mi casa”, se quejó.

A su vez, reveló que “todos los días” tiene que presentarse a la vista de Gendarmería en el balcón de su casa para dar el presente.

“¿Para qué me pusieron la tobillera electrónica?”, se preguntó.

Si bien reconoció que sus actuales condiciones de detención son “más pasables” que en el penal, aclaró que sigue sin tener “intimidad” ya que ni siquiera puede salir al patio sin que la vean.

“¿Qué es lo que quieren conmigo? ¿Quieren que reviente mentalmente? Están violando mis derechos mentales”, advirtió.

“Nos tratan como los peores delincuentes, como asesinos, como narcotraficantes. No somos eso, somos gente de trabajo, de militancia”.”, enfatizó la legisladora electa del Parlasur.

Consultada sobre sus sentimientos a raíz de su largo cautiverio, Sala dijo no sentir “odio” ni “rencor” pero sí “dolor por la injusticia” que a su criterio está atravesando tanto ella como sus compañeras de la Tupac detenidas en Jujuy y Mendoza.

“Siento dolor por la brutalidad que tienen hacia la Tupac, la militancia y por todo lo que está pasando en la Argentina”, agregó.