Los líderes de la Unión Europea (UE) iniciaron ayer una cumbre extraordinaria en Bruselas en la que resolvieron triplicar el presupuesto actual de la operación de vigilancia marítima Tritón, que actualmente es de 2,9 millones de euros al mes y evaluaron posibles acciones militares conjuntas. Además, también aumentarán los recursos para que los países africanos refuercen sus fronteras y puedan contener así la estampida de inmigrantes del sur.
Presionados por el drama del barco que se hundió con entre 700 y 900 personas a bordo en su ruta hacia Italia la semana pasada, los jefes de Estado y de gobierno de la UE se reunieron de urgencia y adoptaron un compromiso que combina medidas de solidaridad con otras que en el fondo tratan de mantener las tragedias alejadas de Europa, evaluó el diario El País.
Bruselas ofrecerá más recursos a países como Túnez, Sudán o Egipto para que controlen mejor sus fronteras y eviten que los inmigrantes accedan a los puertos del Mediterráneo.
Según la AFP, entre las propuestas en esta cumbre figuró la “captura y destrucción de los buques usados por los traficantes de seres humanos”, según un proyecto de declaración.
Una fuente diplomática indicó que los Estados miembro se preparaban a aprobar la declaración, que incluye el plan de acción de 10 puntos presentado el lunes pasado por la Comisión Europea.
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, se mostró prudente. “Nadie se hace ilusiones. Los problemas no serán resueltos hoy”, dijo.
Comentarios