Miguel Ángel Russo encontró en Antonio Medina el hombre que necesitaba para solucionar la falta de desequilibrio que tenía el equipo en los últimos veinticinco metros de la cancha. El Chucky fue la figura en el último encuentro y no sólo marcó el gol de la victoria, sino que viene siendo uno de los puntos más altos en las cuatro victorias consecutivas que consiguió el equipo.
Si bien Medina jugó el primer partido del torneo frente a Sarmiento de Junín, después perdió el puesto. Y a propósito del sacrificio que tuvo que hacer para ganarse la titularidad con Russo, el chaqueño comentó: “Siempre me cuesta. Con cada técnico que viene yo trato de dar lo mejor para terminar jugando”.
“No sé, creo que el equipo es el que está pasando por un buen momento. Gracias a Dios, el otro día me tocó hacer el gol de la victoria. Pero este equipo está muy firme”, subrayó el delantero al ser consultado sobre si su presente es el mejor desde que llegó a Central en 2010.
—En una categoría como esta, ¿qué significa haber conseguido cuatro victorias de manera consecutiva?
—Significa que estamos haciendo bien las cosas. Y que este es el camino para terminar el año lo más arriba posible.
—Más allá de esto, se los nota mucho más tranquilos que antes.
—Esto es algo muy bueno, nos trajo tranquilidad. No veníamos bien. Pero hay que seguir, este torneo es muy largo y el martes tenemos un partido muy difícil ante Gimnasia.
—Los últimos goles que hicieron fueron la terminación de buenas jugadas colectivas. ¿Eso se practica en la semana?
—La idea que ensayamos es jugar por abajo, en especial cuando enfrentamos a un rival que tiene zagueros centrales altos. En los dos o tres últimos partidos se dio lo que venímos trabajando y por suerte pudimos llevar a cabo la idea que pregona el técnico.
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