Tras un plenario realizado ayer, la Federación de Trabajadores Municipales (Festram) decidió que aquellos municipios y comunas de la provincia cuyos empleados no hayan recibido el bono de 1.000 pesos se sumarán al paro impulsado por el Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario resuelto para mañana y pasado. Además, durante el encuentro se decidió solicitar la inmediata convocatoria a paritarias. El titular de la organización, Claudio Leoni, aseguró que “ya son 31 municipalidades y más de 200 comunas las que efectivizaron el pago extra de fin de año”.
En medio de la polémica y con más de una decena de sindicatos en el territorio santafesino que ya llevaron adelante distintas medidas de fuerza en reclamo del pago de los 1.000 pesos, Leoni dijo que “durante el plenario se analizó el resultado de los paros pero dejamos en claro el pedido de la convocatoria a paritaria”.
Del otro lado del mostrador, hoy se reunirán intendentes y presidentes comunales para analizar la situación creada por el reclamo que llevan adelante los trabajadores que aún no recibieron el bono extra que el gobierno provincial pagó a sus empleados y los municipales también quieren percibir.
“Todos los municipales de la provincia deberían ganar lo mismo y los bonos deberían ser comunes y discutirse en la paritaria. El hecho de que lo discutan los trabajadores de las diferentes comunas por separado hace que se transforme en una situación de injusticia”, declaró el intendente de la ciudad de Santa Fe, José Corral, que encabeza la mesa patronal.
Al respecto, Leoni aseguró que lo único que pretende el titular del Ejecutivo de la ciudad capitalina es “confundir”. “Los empleados municipales ya tenemos paritarias comunes desde 1987. Durante los 90 se frenó por las políticas menemistas pero a partir de 2008 logramos reactivarlas y ningún trabajador municipal o comunal puede ganar por debajo del sueldo que se resuelve en paritarias”, explicó.
“Lo que Corral pretende –añadió– es que se discutan los 1.000 pesos en paritarias, cosa que no vamos a aceptar de ninguna manera”.
Leoni consideró que la decisión del gobernador Antonio Bonfatti de pagar el bono a los empleados provinciales no fue una cuestión salarial sino una medida política en un marco muy sensible como fueron las últimas dos semanas de diciembre, “con un levantamiento policial inesperado, con inflación, saqueos y sin liquidez de dólares”. También recordó que uno de los primeros reclamos que hicieron los sindicatos por el pago del bono pedía que incluyeran a los jubilados y pensionados.
Con respecto a las municipalidades y comunas de la provincia que ya pagaron los 1.000 pesos a sus empleados, Corral consideró: “Cuando uno tiene un paro lo primero que tiene que hacer es resolverlo”.
El intendente de Santa Fe, por su parte, aseguró que “se debe ser financieramente muy cuidadoso para no descalzar las necesidades del municipio. Pero a veces hay que rascar la olla y responder a las necesidades de los trabajadores”.
Pareció una frase alentadora para las pretensiones de agentes municipales.
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