Los gremios nucleados en la Unidad de Acción Sindical (UOM, Smata, Municipales, Obras Sanitarias, Norte, Comercio, Garajistas, Aduana) junto a gremios del Cordón Industrial (Municipales de Capitán Bermúdez, Químicos de San Lorenzo) y gremios del Movimiento Sindical Rosarino como Bancarios, se reunieron con el vicario general del Arzobispado de Rosario, Emilio Cardarelli, y con organizaciones sociales, representantes de Apyme y de Unión de Almaceneros y legisladores nacionales santafesinos (Agustín Rossi, Silvina Frana, Luis Contigiani, Marcos Cleri, Lucila del Ponti, Alejandra Rodenas), el legislador provincial Héctor Cavallero y el concejal de Rosario Eduardo Toniolli, con el eje común: el rechazo al Presupuesto 2019.
“Así no sale, el Presupuesto es invotable desde todo punto de vista. Es un presupuesto que quedó absolutamente desactualizado a partir del nuevo acuerdo de Argentina con el FMI que modificó totalmente las variables con las que fue elaborado”, volvió advertir el jefe de los diputados del Frente para la Victoria, Agustín Rossi. El mismo razonamiento había transmitido el legislador días atrás, en una entrevista con otro colectivo sindical, en el que estuvieron gremios que integran el Movimiento Sindical y la CTA de los Trabajadores.
“Es un Presupuesto pensado para pagar los intereses de la deuda y garantizar ganancias a los sectores económicos y financieros y por otra parte contiene ajustes en salud, educación, ciencia y tecnología”, lamentó por su parte Luis Contigiani.
En representación de la Iglesia, Cardarelli llamó al dialogo y al consenso. Pero todo el arco político, gremial y social –exceptuando a la diputada nacional Gisela Scaglia, de Cambiemos, que estuvo presente en representación del oficialismo– expresó su rechazo al Presupuesto 2019.
“Estamos muy preocupados por eso estamos haciendo este trabajo con grupos sociales, la Iglesia, los gremios industriales y diputados nacionales ante un presupuesto que se viene y donde 700 mil millones de pesos están destinados a pago de la deuda y eso va afectar la salud, educación, en las jubilaciones y créditos de las pymes. Este presupuesto como está va a llevar que el ajuste siga siendo mayor”, advirtió el metalúrgico Antonio Donello.
“Es un presupuesto acorde al FMI, no es un presupuesto a satisfacer las necesidades de los argentinos. Este presupuesto tiene una curva descendente que corresponde a la educación, a la vivienda, al trabajo y otra curva ascendente que son los intereses de la deuda externa”, acompañó por su parte el municipal Ratner.
La misma sintonía mantuvo Barros, titular de Smata Rosario. “Este presupuesto no debe salir así como está. Debe modificarse casi en su totalidad. Esto está cada día peor, por eso cada vez somos más lo que nos juntamos a repudiar todas las locuras que este gobierno quiere llevar adelante”, disparó.
En tanto, Oscar Barrionuevo, secretario general de Obras sanitarias Rosario, confió en la fuerza propia para generar un replanteo en el gobierno. “Lo más importante hoy es ver que existe una unidad de gremios, organizaciones, legisladores donde todos aspiramos a que los trabajadores estén en el sitial que les corresponde”, marcó.
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