Familiares de Kevin Carradore, el joven de 18 años que murió hace ocho días de debido a las heridas recibidas tras ser atropellado el sábado a la madrugada por un motociclista en Colombres al 1600, se constituyeron como querellantes en la causa que investiga su fallecimiento. En tanto, el próximo jueves a las 9, sus amigos y allegados realizarán una marcha en silencio para pedir Justicia frente a los Tribunales provinciales de Rosario, de Balcarce y Pellegrini, e invitan a quienes quieran acompañarlos a llevar una flor blanca como símbolo de paz.
Gustavo Di Rienzo, abogado de la familia de Kevin, explicó a El Ciudadano que recién hoy tendrán acceso al expediente, “por lo cual en el transcurso de la semana presentarán en la Fiscalía testigos del siniestro”.
De acuerdo a lo que pudo reconstruir este medio, en base al relato de dos jóvenes que presenciaron el hecho, el sábado 15 de este mes, alrededor de las 0.30, el muchacho fallecido estaba junto a un amigo a punto de cruzar Colombres al 1600, para ingresar a la disco Blue. En ese momento, siempre por lo expresado por los testigos, “un motociclista que conducía una moto roja de alta cilindrada, sin patente y que cruzó el semáforo en rojo, atropelló en el pie a Kevin, empezó a derrapar y terminaron los dos en el piso”.
Dos ambulancias del Sistema Integrado de Emergencia Sanitaria (Sies) fueron convocadas al lugar y trasladaron al conductor de la moto, que sólo recibió heridas leves, a un sanatorio privado, mientras que Kevin fue llevado al hospital Eva Perón de Granadero Baigorria. Por la violencia del impacto, el muchacho ingresó al centro de salud con politraumatismos y rotura del bazo, fue intervenido pero falleció horas más tarde debido a una hemorragia interna, tal como explicó oportunamente el director del policlínico, Eduardo Codino.
El fiscal que intervino en el hecho es Walter Jurado, quien a través de su secretaria dijo que no brindará más detalles del caso hasta recibir los resultados del peritaje realizado en el lugar del siniestro por la Policía de Investigación (PDI), como también las imágenes registradas por dos cámaras apostadas en las inmediaciones de donde ocurrió el hecho.
“Kevin era un excelente hijo, hermano y adoraba a su sobrinita. Terminó el secundario y el año próximo iba a empezar el profesorado de Educación Física”, contó sin consuelo una amiga del chico fallecido.
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