El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, fue dado de alta tras ser internado a raíz de un cuadro de hipertensión. Sin embargo, el mandatario canceló su viaje a la ciudad suiza de Davos, donde se llevará acabo el Foro Económico Mundial.
Lula se encontraba en la ciudad de Recife cuando sintió un malestar, informaron fuentes oficiales. Por eso, su médico personal aconsejó suspender el viaje cuando el avión que lo llevaría a Suiza estaba por despegar.
El mandatario pasó la noche en el Hospital Portugués de esa ciudad del nordeste del país, donde fue sometido a varios estudios y luego fue dado de alta.
Su médico, Cleber Ferreira, dijo que la crisis fue producto del cansancio y el estrés, y afirmó que “el Presidente no es hipertenso, sino que este es un cuadro esporádico”.
Tras abandonar el centro asistencial donde fue atendido, Lula se trasladó a su residencia de San Bernardo do Campo, donde pasará el fin de semana en reposo.
En Davos, además de participar del Foro Económico Mundial, el jefe de Estado brasileño iba a ser premiado con la distinción de “Estadista Global
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