Ciudad

Los casos de tuberculosis disminuyen año tras año

Provincia informó que en las últimas dos décadas la tasa de notificación bajó un 36 por ciento.


El Ministerio de Salud de Santa Fe informó que los casos de tuberculosis en la provincia descendieron un 36 por ciento en los últimos veinte años. El dato viene a colación luego de que se diagnosticara esta enfermedad a una alumna de tercer año del colegio Nuestra Señora del Valle, en la zona sur de la ciudad. La joven fue internada en el Cemar, donde comenzó un tratamiento que puede durar hasta un año, pero está fuera de peligro. Desde el Programa de Control de Enfermedades Respiratorias y Tuberculosis destacaron que Santa Fe es la cuarta provincia respecto a la cantidad de enfermos, aunque en tasas –en relación a la población– ocupa el décimo tercer puesto.

Bernardo Salavadores, a cargo de dicho programa, indicó que entre 1993 y 2003 la tasa de notificación de casos se redujo un 26,2 por ciento (2,6 por ciento anual), pasando de 836 enfermos a 659. En los últimos diez años, el descenso fue de 2,3 por ciento anual. El año pasado, se notificaron en toda la provincia 537 enfermos nuevos. De ese total, el 64 por ciento (343 enfermos) son del departamento Rosario, el 13 por ciento del departamento La Capital y el 9 por ciento del departamento General Obligado. Cabe señalar que de esos 537 contagiados, sólo 89 son menores de 18.

La tuberculosis, señaló Salavadores, es una enfermedad que no fue erradicada en el mundo. En la Argentina se notifican más de 9 mil enfermos. Santa Fe es la cuarta provincia respecto al número de enfermos luego de provincia de Buenos Aires, la ciudad de Buenos Aires y la provincia de Salta. Pero en tasas (relación con la población) se encuentra en décimo tercer lugar, muy por debajo de Jujuy (48,5 por ciento); Salta (45,7), Santa Cruz (40,4), Formosa (34,1) y ciudad de Buenos Aires (33,8 por ciento).

Ayer se conoció el caso de una chica de una escuela de la zona sur, lo que generó preocupación en la comunidad educativa. Al respecto, el responsable regional del Programa Provincial de Enfermedades Respiratorias y Tuberculosis, Ernesto Careno, indicó que la paciente está en estudio y que las baciloscopías han sido negativas, por lo que de ser una tuberculosis sería una de las que no contagian. Ayer se aguardaba el resultado del cultivo que confirme o descarte finalmente la enfermedad. La niña está siendo atendida en un hospital provincial y Careno aclaró que se implementaron ya todas las acciones de control de foco como es norma y se toman siempre ante situaciones similares.

El caso se registró la semana pasada en la escuela secundaria Nº 3035, parte del complejo educativo Nuestra Señora del Valle, ubicado en la manzana delimitada por Dorrego, Batlle y Ordoñez, Moreno y Piedras.

A ese nivel asisten unos 800 adolescentes tanto del barrio 17 de Agosto como de La Granada y Las Flores. Según contó a El Ciudadano el representante legal de la institución, Hugo Casares, los directivos tomaron conocimiento del caso el lunes pasado cuando los padres de la joven explicaron que no había asistido a clases por sufrir síntomas de gripe. El martes no hubo clases por reuniones relativas con la institución y el miércoles los directivos se contactaron con el Ministerio de Educación provincial para conocer el protocolo frente a posibles casos de tuberculosis.

Síntomas reveladores

La tuberculosis es una enfermedad producida por el bacilo de Koch. Se transmite de un enfermo a las personas sanas, por lo que el diagnóstico precoz es fundamental para garantizar la curación y detener el foco de infección. Para lograr ese diagnóstico se realiza un estudio en aquellos pacientes que tengan tos por más de quince días, estudios que son gratuitos y se pueden hacer en todos los centros de salud.

La tuberculosis se cura completando un tratamiento que dura como mínimo seis meses y es totalmente gratuito en todo el país. La vacuna BCG protege a los niños de las formas graves de tuberculosis.

Los síntomas más frecuentes son: tos persistente, acompañada generalmente de catarro que a veces puede ser con sangre, decaimiento, pérdida de apetito y de peso, fiebre y sudoración vespertina.

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