Los dos encuentros amistosos de preparación jugados en Córdoba dejaron un saldo positivo en Rosario Central y varias cuestiones para analizar de cara al inicio del Torneo Final.
Es que el Canalla, más allá que no pudo quedarse con el triangular, evidenció algunos cambios con respecto al Central que jugó el torneo pasado y ratificó cuestiones positivas que fueron fundamentales para la obtención de los 26 puntos.
Lo más importante de todo es que el equipo de Miguel Ángel Russo tiene una idea fija de qué quiere y cómo hacer para lograrlo.
Con respecto a los principales cambios que se pudieron ver con respecto a lo hecho en el Inicial es el cambio de esquema. El técnico parece estar decidido a jugar con un 4-4-2 y así dejar el 4-3-3 con el que jugó la última parte del torneo pasado.
Uno de los motivos principales del cambio de esquema es la presencia de Jesús Méndez en la posición de “doble cinco adelantado”. El mendocino, más allá de que no alcanzó su nivel ante Independiente y frente a Belgrano, potenció al resto de sus compañeros de la mitad de la cancha. Tal es así que es la línea que mejor funcionamiento ha demostrado en toda la pretemporada. Y uno de los principales beneficiados del regreso de Méndez ha sido sin duda Federico Carrizo.
El Pachi fue el mejor jugador que tuvo el Canalla en el triangular cordobés. No sólo porque está jugando en la posición en la cual se siente más cómodo, sino porque cumplió con lo que tanto se le pide: terminar las jugadas. Ante el Rojo logró imponer su juego y frente a Belgrano fue el mejor de la cancha con golazo incluido. Además, ante el Pirata demostró que puede ser una buena alternativa a la hora de asistir a los hombres de punta.
Otro de los cambios es que con la presencia de Gonzalo Castillejos como titular, Central intenta presionar más arriba y esto se pudo ver en Córdoba.
Claro que también hay varios ítems para corregir de cara al domingo 9 de febrero cuando el Canalla juegue con Quilmes en el inicio del Torneo Final.
Al equipo le sigue faltando de mitad de cancha hacia atrás y en los dos partidos volvió a mostrar falta de sincronización en la última línea. Además de un problema de larga data: el retroceso.
A la dupla de zagueros centrales formada por Alejandro Donatti y Lisandro Magallán, le falta voz de mando y eso ocasionó varios problemas. Además, esa falta de comunicación involucra también a Nery Domínguez. Ya que con la presencia de Méndez, el juvenil deberá aceitar junto a los defensores la distancia que tiene que haber entre el medio y la defensa.
Otra de las cuestiones negativas pasa por encontrar la dupla de atacantes de cara al inicio. Más allá de que todo indica que los elegidos serán Castillejos y Luna, el Chino no ha tenido buenos encuentros preparatorios. Entonces ahí tendrá que aparecer la mano del entrenador para resolver la falta de gol de los hombres de punta que ha tenido el Canalla en Córdoba.
Por último, en los dos partidos se pudo ver una baja en el rendimiento en el segundo tiempo y algunas distracciones en el inicio del mismo. Sin dudasesto también será algo a considerar por parte del cuerpo técnico aauriazul.
El inicio del campeonato está a la vuelta de la esquina y si bien hay varios aspectos por mejorar, el triangular cordobés dejó un saldo positivo.
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