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Acoso online

Las mujeres empiezan a ser víctimas de violencia sexual virtual a los 9 años

Así lo detalla un informe del Observatorio de Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá), que además revela que la población más afectada por este tipo de violencia son las mujeres e identidades feminizadas de entre 15 y 19 años. Destacan la importancia de la ESI en materia de prevención


El Observatorio MuMaLá, Mujeres, Disidencias, Derechos presentó un informe sobre la violencia que mujeres e identidades feminizadas sufren cuando hacen uso de internet y de redes sociales. Los resultados revelan que, en promedio, empiezan a ser víctimas de este tipo de violencia desde los 9 años y que el pico de mayor frecuencia se da en torno de los 14. Además, expone que la población más afectada es la que tiene entre 15 y 19 años. De la organización sostienen que la violencia de género que se vivencia en la calle tiene su correlato en el mundo virtual y, por eso, exigen que el estado brinde herramientas específicas para erradicarla, como la Educación Sexual Integral.

“Un dato importante es que las chicas que han buscado ayuda o asesoramiento lo han hecho en sus espacios educativos, lo que habla de la importancia de reforzar la Educación Sexual Integral (Esi) como una herramienta para abordar este tipo de situaciones, y que es necesario reforzar”, dijo a El Ciudadano Sofía Botto, militante de Mumalá (Mujeres de la Matria Latinoamericana).

El informe “Violencia On-Line contra Mujeres e Identidades Feminizadas” fue realizado a partir de una encuesta cuantitativa dirigida a 836 adolescentes, mujeres e identidades feminizadas de 17 provincias y la ciudad de Buenos Aires. El objetivo fue visibilizar que el acoso que las mujeres y las identidades feminizadas sufren en las calles se replica también en internet a través del ciberacoso sexual o acoso sexual virtual.

“Lo que observamos es que, como ocurre cuando una empieza a ser víctima de acoso sexual callejero, en el acoso virtual las chicas empiezan a autorrestringir sus libertades para sentirse más seguras. Muchas chicas dejan de tener cuentas públicas, o cambias sus nombres de usuario, o que por situaciones de violencia virtual han llegado a cambiarse de curso en la escuela”, detalló Botto.

La búsqueda de esta organización es la de exigir al Estado –con los resultados de la investigación como soporte– que incorpore políticas públicas específicas incluyéndolas en el Plan de Erradicación de Violencia hacia las Mujeres e Identidades Feminizadas.

Los números

El informe revela que las más afectadas por la violencia online son las jóvenes de entre 15 y 19 años, ya que en todas las categorías los porcentajes de víctimas de alguna situación de violencia social virtual aumenta dentro de ese rango etario. El informe también expone que es a partir de los 9 cuando, en promedio, se comienza a padecer este tipo de violencia, que se hace mucho más frecuente en torno a los 14 años.

El 58% del total de las encuestadas dijeron que recibieron comentarios sexuales no deseados y no consentidos a través de internet. El porcentaje sube al 70% entre adolescentes y jóvenes. También el 62% de las encuestadas recibieron fotos o videos con contenido sexual de otras personas sin haberlo solicitado.

Además, el 65% de las encuestadas refirió que siendo menores algún adulto desconocido trató de contactarse con ellas a través de las redes sociales, lo que constituye casos de grooming.

Una de cada cinco encuestadas respondió que recibió amenazas públicas por medio de redes sociales, y dos de cada cinco recibieron amenazas anónimas. En tanto, una de cada tres recibieron insultos u ofensas.

El 22% de las consultadas dijo que en algún momento publicaron en redes sociales rumores falsos sobre ellas, y en las adolescentes el porcentaje trepa hasta el 34%. Además, una de cada cinco dijo que alguna vez se hicieron pasar por ellas en internet, y en las adolescentes la proporción aumenta a dos de cada cinco.

Una de cada tres mujeres e identidades feminizadas dijeron que conversaciones privadas e íntimas con otra persona terminaron por hacerse públicas.

Sin embargo, de acuerdo con el informe, el 83% no se asesoró frente a estas situaciones y, quienes decidieron no denunciar, lo hicieron por no considerarlo importante (35%), por falta de información (27%) o por miedo o vergüenza (15%). En el caso de haber denunciado o pedido ayuda, la mayoría de las adolescentes lo hicieron en sus escuelas o ámbitos educativos.

Desde Mumalá sostienen que lo que este informe deja en evidencia es la falta de una mirada integral y con perspectiva de género por parte del Estado al momento de abordar este tipo de situaciones, en las que las adolescentes son la población más vulnerable. “Es ahí donde exigimos trabajar la prevención en la escuela y en los hogares a través de la aplicación de la Educación Sexual Integral (Ley Nacional 26150)”, dijo Botto.

“Lo que intentamo hacer a través de los informes es mostrar otro tipo de violencias cotidianas que inciden en la subjetividad con la que cada mujer e identidad feminizada atraviesa su vida. Hablamos desde lo que implica que una foto tuya circule por redes sociales, que implica un daño permanente porque puede circular por mucho tiempo; o lo que puede generar el recibir imágenes con contenido sexual explícito, pornográfico, sin pedirlo. Y son situaciones que son cotidianas para las adolescentes y jóvenes”, remarcó

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