Aunque con menor fuerza que en Capital Federal y la provincia de Buenos Aires, donde la cantidad de evacuados llegó a más de mil personas y hubo un fallecido, en Rosario también se sintieron las consecuencias del temporal que se abate sobre toda el área central del país. Ayer, se dieron dos situaciones de gravedad, justo en zonas ya castigadas por la marginalidad social. Una fue en barrio Saladillo Sur, donde se anegó el llamado brazo seco del arroyo del mismo nombre desbordando sobre varias viviendas precarias asentadas en el lugar. La causa, además de los más de 40 milímetros de lluvia que se abatieron sobre la ciudad, fue el taponamiento con basura del zanjón que drena las precipitaciones pluviales hacia el río Paraná. En tanto, en la Vía Honda, zona sudoeste, aunque en grado menor se produjo una situación similar de obturación de un escurrimiento debida, en este caso, a materiales de construcción. Allí, además, los habitantes montaron una protesta con corte y quema de gomas en Avellaneda y Garibaldi durante la tarde, en reclamo de ayuda y soluciones estatales.
En la zona del barrio Saladillo, el inconveniente se suscitó luego de que se obstruyera un conducto que conecta el llamado brazo seco (nace en la zona de las viejas piletas municipales y transcurre por debajo de avenida de Circunvalación a la altura de Avenida del Rosario) con el arroyo Saladillo. Desde el municipio explicaron que ese caño se obturó por los desechos que parte de los propios damnificados arrojan en el lugar.
Con el fin de intentar desbloquear el tubo para que el agua pueda drenar hacia al arroyo, operarios municipales trabajaron hasta las siete de la tarde con una pala mecánica. La tarea fue más que dificultosa. Desde Defensa Civil explicaron que primero se tuvo que fortalecer el piso para que la máquina no se hundiera. Lo cierto es que, hasta anoche, no se había podido dar con el entubamiento. Al cierre de esta edición se supo que estaba en camino hacia el lugar una bomba de gran porte para sacar el agua.
Al mismo tiempo, y según los propios vecinos, a última hora sólo había “unas pocas” personas que habían decidido dejar sus frágiles casas desbordados por la situación. De todas formas, oficialmente se informó que no hubo evacuados, a pesar de que este medio pudo comprobar en el lugar que el agua había ingresado en algunas viviendas.
Según los vecinos, a la vera de ese brazo seco habitan poco más de 50 familias. Osvaldo, el papá de tres chiquitos y uno de los damnificados, explicó que hacía 12 años que ese espacio no se veía desbordado por el agua tal como sucedió ayer. “Después de la inundación de 2000 nunca más nos había sucedido esto”, graficó.
En tanto, en la Vía Honda se dio una situación similar, vinculada con atascos que, según fuentes oficiales, provocaron en la zona desechos materiales de un plan de viviendas en construcción. En ese sector, además, los habitantes montaron una protesta de varias horas.
Según los vecinos, a causa de la pendiente del terreno el agua comenzó escurrir hacia sus viviendas. “Tenemos agua hasta las camas donde duermen las criaturas. Y desde Defensa Civil no vinieron a hacer nada”, se quejó un joven vecino. Al cierre de esta edición, fuentes oficiales señalaron que en este caso tampoco hubo evacuados y que la situación estaba controlada.
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