Secretaría de Género de Central de Trabajadores de la Argentina (CTA-T)
El 25 de noviembre es el día de conmemoración, a nivel internacional, de la eliminación de todas las formas de violencia cometidas contra las mujeres, en recuerdo al femicidio de las hermanas Mirabal, por la dictadura de Trujillo, en Colombia.
Si bien Argentina ha sancionado una Ley, en el año 2009, (Ley N° 26.485), para el abordaje de esta problemática, queda un largo camino por seguir recorriendo. En dicho trayecto, las escuelas son una parte fundamental de este proceso, no sólo en cuanto al desarrollo de nuevas prácticas educativas, sino en la posibilidad de desnaturalizar situaciones violentas que antes no eran percibidas ni abordadas como tal.
Este 25 de noviembre más que nunca, se deben alzar las voces para visibilizar las violencias que sufren las mujeres, ya que, a lo largo de estos años, al calor de las diferentes movilizaciones y acciones de diversos grupos sociales, y sindicales se logró instalar en la agenda pública la necesidad de terminar con la violencia que sufren las mujeres, que va de las formas más sutiles a expresiones terribles como los abusos o femicidios.
En el tiempo que lleva transcurrida esta pandemia, las denuncias por violencia doméstica y las tasas de femicidios se han elevado de formas alarmantes, siendo esta una temática que, como sociedad, debe ocuparnos y preocuparnos. Las instituciones del Estado, las organizaciones sociales y los espacios sindicales, son responsables de trabajar mancomunadamente en el desarrollo de acciones que “pongan sobre la mesa” el problema de las violencias.
Recordamos que Argentina tiene un largo recorrido en la pelea por sancionar leyes que acompañen un proceso de eliminación y erradicación de dichas violencias, y el gremio docente, en particular, en la inclusión, dentro de las modalidades de licencias, a la de violencia de género como una causa justificada de inasistencia.
De este modo, en diversos planos, social, cultural, gremial, gubernamental, la problemática adquirió una importancia inusitada, marcándose como punto de inflexión la masiva marcha “Ni Una Menos” en 2015, luego del femicidio de Chiara Páez.
En el plano educativo, Santa Fe adhiere a Ley nacional “Educar en igualdad” (N° 27.234) proponiendo que en todos los establecimientos educativos haya un día específico donde se trabaje la problemática de la violencia contra las mujeres, y se reflexione sobre las distintas modalidades en las que se puede ejercer.
Esta normativa ha sido acompañada desde Amsafe con propuestas para el aula, cajas de herramientas y actividades para estudiantes que han favorecido ampliamente el abordaje del tema.
Por tanto, es de suma importancia que la escuela y todxs lxs actorxs que allí intervienen, familias, estudiantes y comunidad en general, puedan pensarse como agentes fundamentales, no solo en lo específico de la conmemoración del 25N, sino en la implementación y desarrollo de prácticas que apuesten a la consolidación de infancias y adolescencias libres de violencias y abusos contra las mujeres.
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