Edición Impresa

Vida y Plenitud

La Energía del Amor

Para la autora somos plenos cuando admitimos que no somos perfectos, somos humanos aprendiendo en cada momento a evolucionar, tratando de dejar de lado toda sensación de vacío que podamos sentir y aceptarnos.


Es necesario aprender a amarnos a nosotros mismos, aprender a aceptarnos a nosotros mismos en primer lugar, a perdonarnos por ser cómo somos, aceptar que existe en nuestro interior una parte de nosotros que resulta difícil de aceptar; puede que no nos agrade, por ejemplo, ser inseguros o indecisos, puede que muchas veces nos volvamos exigentes considerando que deberíamos ser mejores de lo que somos. En otras palabras, somos luces y sombras que nos hacen ser como somos, debemos decidir por aceptar las partes oscuras en nuestro ser, en nuestra forma de ser, con nuestros miedos e inseguridades, al igual que con aquello que más nos gusta de nosotros; cuando ello ocurre es que comenzamos a vivir plenamente.

Somos plenos cuando admitimos que no somos perfectos, somos humanos aprendiendo en cada momento a evolucionar, tratando de dejar de lado toda sensación de vacío que podamos sentir. En ocasiones puede que sintamos que somos imperfectos; necesitamos que alguien más aparezca en nuestras vidas que nos complemente, que nos haga sentir que es nuestra otra mitad para que desaparezca la infelicidad que se esconde en nuestro interior.

Aunque todo esto sea posible, que encontremos a alguien que es nuestro complemento prefecto, es necesario en primer lugar sentir amor por uno mismo. Debemos amarnos y perdonarnos a nosotros mismos por ser cómo somos. Para que esa sensación de vacío desaparezca es necesario ir hacia nuestro interior para poder percibir la plenitud de nuestro Ser, sentir que soy un ser completo, lleno de amor envuelto y protegido por la energía del amor universal que viene a nuestro encuentro, nos contiene y sostiene. De este modo, nada es más importante que sentirnos satisfechos con quiénes somos.

La Energía del Universo

Esa sensación de vacío, esa carencia que sentimos nace de una limitación de sentirme completo, único, amado y protegido por la Energía del Universo. De esta manera, mi energía vital, mi ki, pasa de estar desvitalizado carente de fuerzas sintiéndose incompleto a estar unido al ki universal, a la energía del universo que nos revitaliza, nos prepara para estar bien, nos ayuda a sentirnos completos, ya no somos alguien separado del Universo sino que estamos integrados a un Todo abarcador.

Si por dentro me siento limitado, carente, nada exterior a mí puede complementarme; puede que un trabajo, el prestigio social, un auto, una casa, una pareja nos puedan mejorar pero si primero no aceptamos quiénes somos nunca será suficiente. La mente tenderá a ir por más, es como si solo lo exterior a mí fuera importante. Siempre habrá “algo que falte”, nunca podemos sentirnos completos; por perfecto que sea, una parte siempre encontrará otra zona de nuestras vidas a la cual le falte algo, a la cual lo exterior le resulte necesario.

Es necesario aceptar todas las situaciones dolorosas de nuestras vidas en las que fuimos parte, todo el dolor sentido en un momento, la infelicidad, la insatisfacción, deben ser aceptadas; no negarlas ni taparlas, aceptarlas, en primer lugar darnos cuenta que a través de ella, aprendemos, crecemos y evolucionamos a medida que vamos superando cada conflicto vivido en algún momento nuestras vidas.

De cada situación de la cual salgo fortalecido/a se forma en mi interior una sensación muy grande en la cual aprendo a revitalizarme, a trasmutar todo dolor en un algo preciado que me permite crecer, creyendo en mí mismo, en mis propias cualidades y capacidades que son únicas en mí. Perdonate y perdoná a quienes estuvieron involucrados en esa situación, porque de ese modo dejás de ser prisionero de esa situación. Ellos ayudaron, a su modo, a que evolucionaras a dejar de ser oruga para transformarte en mariposa que puede elevarse de una montaña de dificultades y atreverse a volar.

La clave del Reiki

El Reiki es una excelente herramienta para aprender a evolucionar, a sentirnos fuertes y poderosos, manejar nuestra propio ki, energía vital, y a relacionarnos con el ki universal, la energía de universo nos revitaliza, nos prepara para creer en mí mismo, sabiendo que el Universo va a nuestra par.

El Reiki nos ayuda a tener en cuenta esta clave: Ámate, ama a los otros de la misma manera que te tratas a ti mismo. La energía del Amor es la que permite elevarte por encima de toda tragedia, de toda situación dolorosa en la que estuviste envuelto. Cuanto más te relaciones con la energía del amor, más pierde fuerza la energía que proviene de nuestros miedos. Sé libre de tus temores, acéptalos, son una parte tuya que se olvidó de que estamos integrados al Universo abarcador, la energía del amor nos nutre.

Debes sentir que eres amor, la energía del amor vive dentro de ti, no está fuera de ti esperando encontrarte, cuando lo hagas te darás cuenta que estás sintiendo amor por ti mismo, por encima de todo; luego podrás amar y ser amado/a. Ámate, valórate, apréciate aunque haya partes de ti mismo que no te gustan debes integrarlas a ti, no estás separado de ellas. No permitas que tu mente te llene de dudas acerca del amor, si ello sucede deja que tu fe en ti mismo, tu fe en el amor, tu fe en tus propias capacidades, en tus propias características y donde te demuestren cuán fuerte eres.

Los cinco principios

Si siempre voy al afuera, al mundo exterior, y nunca me contacto con mi interior nunca seré libre, puesto que dependo de algo o alguien para sentirme satisfecho conmigo mismo. El Reiki nos da una herramienta para llegar a contactarnos con nuestro interior, nos enseña a través de los diversos niveles y a través de la meditación a conectarnos con nuestra respiración, la cual nos conecta con nuestro ki, nuestra energía vital. Nos conecta con el Hoy a través de los cinco principios del Reiki: Sólo por Hoy: 1º No me enojo, 2º No me preocupo, 3º Soy agradecido, 4º Trabajo duro conmigo mismo, 5º Respeto todo ser vivo. Nos ayuda a dejar de lado las preocupaciones que nacen del futuro incierto y de un pasado que no existe más que en mi mente.

Cuando me conecto con la energía del amor por mí mismo comienza a renacer en mí la fe, la fe en mi propio poder interior, confío en mis propias capacidades, me siento seguro, mi autoestima se fortalece, sabes que no importa el tiempo o el espacio, el amor por alguien más puede ser concretado manteniendo firme la voluntad para lograrlo.

El Universo traerá a mí esa persona con quien pueda compartir el amor que siento por mí misma y el amor hacia él/ ella de la misma forma sabiendo que somos dos seres completos tratando de unirnos a través de la energía del amor, no dos seres que buscan al otro para quitar ese vacío en nuestro interior.

Persiste, sé paciente para lograrlo. Las dificultades que atraviesas muchas veces ponen a prueba tu amor. Céntrate siempre en el Hoy, deja ir todo lo negativo vivido, libérate de tus recuerdos dolorosos, integra tus emociones negativas a ti, ilumínalas con la energía del amor universal. Atrévete a intentarlo de nuevo hasta poder lograrlo. Entonces serás libre para amar y ser amado.

Comentarios