La cúpula dirigencial auriazul volvió a reunirse ayer por la tarde con emisarios de la empresa auditora Pricewaterhouse, que desde hace varios meses realiza un estudio contable en el club para conocer con la mayor precisión posible la deuda de Rosario Central.
Durante el cónclave se volvió a analizar detalladamente, como se había hecho el miércoles, el informe preliminar que presentaron los auditores de Price.
Y si bien la cifra final aún no está definida, se estima que el número rondará los 88 millones de pesos. Y para ello se realizará una nueva reunión esta tarde en la sede céntrica.
De todos modos, la deuda real de Central supera holgadamente los 100 millones de pesos. ¿Por qué la diferencia? Es que buena parte de lo que se debe corresponde a juicios contra el club. En total, existen unos 200 reclamos judiciales por los que los canallas deberían responder, en caso de perder las demandas en los tribunales, con casi 50 millones de pesos.
El inconveniente principal para definir el número de la deuda pasa por la estimación de lo que Central tendrá que pagar por cada uno de esos reclamos.
Tras repasar los juicios, auditores y dirigentes consensuaron en un principio que, de las más de 200 demandas existentes, el club tendría la obligación de pagar en total alrededor del 50 por ciento de la deuda total por juicios.
Sin embargo, sobre los valores que le reclaman a Central por vía judicial (con costas incluidas), se previsionaron para pagar poco más de 28 millones de la misma moneda. Lo que significaría un ahorro del 45 por ciento de la deuda total por juicios (NdR. poco más de 21 millones de pesos). Por lo tanto el cálculo de previsión de pago por las demandas estaría estimado alrededor del 75 por ciento del total.
Además de establecer con la mayor claridad posible los números del activo, el pasivo, el patrimonio neto del club y el déficit del ejercicio anterior, en la auditoría, Central se declararía dueño del 20 por ciento de los derechos económicos de Ángel Di María, y del 80 por ciento de los derechos económicos de Guillermo Burdisso, más allá de los distintos reclamos que existen al respecto. Dos temas que seguramente generarán repercusión en el ámbito judicial.
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