Paola Cándido
El Dieta Club, lugar donde se ofrecían servicios para bajar de peso liderado por el conocido médico Alberto Cormillot, cerró sus puertas hace dos semanas y dejó a casi 30 personas sin ese trabajo. Entre ellos hay médicos, psicólogos, nutricionistas, profesores de educación física y administrativos. “Hace más de dos años bajó la cantidad de clientes a la mitad. A eso se le sumó que las obras sociales empezaron a recortar y no reconocer los tratamientos, entre otras cuestiones. Pasamos por varias crisis pero esta, lamentablemente, nos ahogó”, dijo a El Ciudadano Mauro, uno de los que hacía tareas administrativas en el lugar.
El Dieta Club –que se ubicada en Rioja 1585– estuvo 30 años en Rosario. Funcionaba como una franquicia; la empresa que lo representaba era Saludar S.A y estaba en convocatoria de acreedores.
Según contó el ex empleado, el propietario del inmueble les avisó a principio de diciembre que no les iba a renovar el contrato de alquiler.
“Sabíamos por la situación de crisis que pasaba el Dieta Club pero no nos imaginamos que iba a cerrar definitivamente. Pasamos de tener 300 personas que venían a 150. Las obras sociales empezaron a recortar los tratamientos. Eso sumado a que en vez de pagarnos a los 30 días nos depositaban a los 90. Fue una dificultad financiera muy grande”, explicó Mauro.
El Dieta Club trataba problemas vinculados al sobrepeso y desórdenes de alimentación. Contaba con un amplio gimnasio, consultorios y salones para hacer diferentes actividades, entre otros espacios.
Mauro estuvo dos años trabajando en el lugar y dijo que todavía no resolvieron el pago de las indemnizaciones de los empleados. “Al tema lo está manejando el abogado de la empresa”, aseguró. “Tratamos de remontarla pero no se pudo. La crisis nos hundió. Fue difícil para todos. De un día para el otro nos quedamos sin trabajo”, se lamentó el joven.
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