Rodrigo Arévalo
La inflación hace peligrar el acuerdo stand by entre el gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Una de las exigencias del organismo internacional de crédito es que la inflación de 2018 no supere el 32%, algo muy probable si se tiene en cuenta que Indec informó este martes que la de junio fue de 3,7%, acumulando un 16% en el primer semestre del año.
En diálogo con El Ciudadano, el economista Federico Fiscella explicó que la meta solicitada por el FMI comprende una “banda” entre el 27% y el 32%. Si la suba de precios supera el 27% pero no el 32%, el acuerdo por el crédito stand by de 50.000 millones de dólares tiene una cláusula de revisión que daría la posibilidad de modificarlo. En cambio, si la inflación supera el 32% tendrían que rehacer el memorándum completo.
Fiscella no ve que la meta del Fondo pueda ser cumplida por el gobierno de Mauricio Macri. “El número del martes indica que no va a ceder. La inflación núcleo y la mayorista dieron extremadamente altas y esto garantiza que en los próximos meses esté siempre por encima del 3%”, indicó el especialista.
El economista rosarino se animó a dar un número para fin de año: “Dará alrededor del 36%”. En esa línea, Fiscella alertó: “Si pasa esto, habrá que ver cómo responde políticamente el FMI. La salida de este tipo de gobiernos a una presión es una devaluación o megadevaluación, que podría generar una hiperinflación. Porque hoy el dólar está estabilizado, pero con una cantidad impresionante de sedantes que veremos qué pasa cuando se los saquen porque una tasa de interés del 50% es insostenible”.
Ni en dibujo
Por otra parte, Fiscella descartó la posibilidad de que el Indec pueda modificar arbitrariamente el índice de inflación para que el crédito del FMI no corra riesgo. “Con el FMI atrás, se corta un poco la posibilidad de dibujar el número. El FMI se daría cuenta si el Indec no da bien la cifra”, dijo Fiscella.
La titular del FMI, Christine Lagarde, llegará este viernes al país para supervisar la marcha del acuerdo de financiamiento. Si bien la diplomática francesa participará de la tercera reunión de ministros de Finanzas y presidentes de Bancos Centrales en el contexto del G20, aprovechará su visita para supervisar con el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, la reducción del déficit que deberá seguir la Argentina tras el salvataje negociado con el organismo multilateral.
“El borrador del FMI que habla de Argentina no es muy simpático. Los que suben o bajan el pulgar para prestar plata es el staff. No es muy relevante lo que diga Lagarde, que es una diplomática que no tiene la última palabra”, expresó el economista rosarino y concluyó: “La política que el FMI nos está forzando a realizar nos va a llevar a una recesión”.
Dólares voladores
Un crédito de tal magnitud, ¿para qué será usado por el gobierno? Según el economista de la Fundación Pueblos del Sur, Daniel Guida, estos dólares serán fugados. “El gobierno no habla ni una sola palabra de crecimiento económico o nuevas inversiones. Sólo hablan de cómo estabilizan para seguir llevándose los dólares afuera”, lanzó.
“Dólar que entra se fuga. Me avergüenza hablar de números y cuestiones técnicas cuando lo que hay es una verdadera estafa al pueblo argentino”, dijo el economista Guida.
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