El juez federal Sebastián Casanello negó ayer que la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner esté involucrada en la investigación por lavado de dinero que lleva adelante y sostuvo que no será citada a declarar como testigo.
“No está involucrada, y no será citada a declarar como testigo”, manifestó Casanello, quien rechazó además que la investigación que involucra al empresario Lázaro Báez vaya “lenta”.
En declaraciones a las radios Nacional y La Red, el titular del Juzgado de Instrucción en lo Criminal y Correccional 7 salió al cruce de las críticas, afirmó que la causa no tiene un “ritmo cansino” y se quejó de quienes lo apodan “la tortuga” a raíz de su desempeño en el caso Báez.
“Hace tres años trabajamos sin pausa. La causa está impulsada desde el día uno. No estamos paveando. Decir que no queremos que la causa avance rápido son especulaciones infundadas”, cuestionó.
Además, remarcó que “cuando hablan de que la causa va lenta, no tienen idea”, ya que “el lavado de dinero es un delito muy complejo” y “para procesar a los imputados hubo que recurrir a jurisprudencia española porque acá no la había”.
“Se han dicho tantas cosas en relación a mí, no me la puedo pasar contestando. Tengo que trabajar”, se defendió y agregó: “Es una barbaridad decir que protejo a Cristina Kirchner. Yo soy juez. Absolutamente tengo la conciencia tranquila”.
El magistrado se defendió además ante las críticas por la demorada orden de allanamiento de La Rosadita y, al respecto, sostuvo que “los jueces no van por la calle con un revolver evitando un delito, ni actuando sin que un fiscal haga un requerimiento de instrucción”.
“Si hubiera actuado antes, los allanamientos hubiesen sido nulos. Se habla con absoluto desconocimiento”, criticó el funcionario judicial, que hizo especial énfasis en la dificultad que conlleva la investigación de un delito por lavado de dinero.
Casanello rompió el silencio luego de que se difundieran los videos en los que se observa al hijo del empresario Lázaro Báez contando millones de dólares y euros en la financiera SGI, conocida como La Rosadita: en declaraciones al programa “La Cornisa”, por el Canal América, el magistrado reconoció este domingo por la noche que la aparición de las cintas cambiaron el escenario de la causa.
“Se llama a indagatoria (a Báez) porque apareció esta prueba. Hasta ahora no había pruebas con la contundencia de los videos”, subrayó respecto a la convocatoria que alcanza, además, al contador Daniel Pérez Gadín, a Fabián Rossi y Walter Zanzot, entre otros.
El juez sostuvo que para él “fueron una sorpresa” las imágenes: explicó que esas cintas no constaban en la causa y remarcó que cuando realizaron allanamientos “no había ningún server (servidor informático) que almacenara videos”.
“Nosotros seguimos una causa por lavado de dinero, que es un delito con características propias. Es dinero de origen delictivo, implica que es necesario hurgar para buscar el origen del dinero”, apuntó.
Casanello insistió en que “este es un caso de lavado y es muy complejo para poder armar el rompecabezas”, al tiempo que agregó que “en los videos está el dinero en ese lugar, en ese momento, con esos actores”, lo que permite cerrar el rompecabezas y llamar a indagatoria”.
“Hay un cuadro indiciario complejo, varias fichas de un complejo rompecabezas. Hay información de un fraude tributario que podría ser el delito precedente”, indicó y adelantó que próximamente podría declarar Federico Elaskar, el financista que era propietario de SGI. Explicó además que fijó la fecha de convocatoria a partir del 23 de abril para no violar las garantías y el derecho de defensa de los implicados, a pesar de lo cual ya lo “recusaron dos abogados defensores por los llamados a indagatoria”.
“La investigación tiene 98 cuerpos de actuaciones y, si establezco un plazo menor para las indagatorias, me expongo a una recusación por violar el derecho a la defensa. No es un capricho, no hay lentitud. Estamos interesados en que esto avance, no queremos dar un paso y retroceder dos. Todos queremos procesos rápidos, la ciudadanía y quienes trabajamos en Tribunales”, concluyó el juez.
Rafecas rechazó causa por enriquecimiento ilícito
El juez federal Daniel Rafecas rechazó ayer investigar una denuncia contra la ex presidenta Cristina Kirchner por presunto enriquecimiento ilícito. Fuentes judiciales informaron a NA que el juez consideró que no era competente para investigar a Cristina, a raíz de una denuncia impulsada por la diputada Margarita Stolbizer por inconsistencias en su declaración jurada del período 2014.
Inicialmente, la denuncia había sido presentada ante el juez Sergio Torres y el fiscal Carlos Rivolo, quienes se la enviaron por conexidad a Rafecas, puesto que este último ya tiene una investigación por irregularidades en las declaraciones juradas de Cristina Kirchner por el período 2010 a 2013. Para Rafecas se tratan de “hechos distintos” y “no acumulables” a la causa bajo su poder.
Al declararse incompetente, ahora es el presidente de la Cámara Federal, Martin Irurzun, el que determinará quién debe hacerse cargo de la denuncia.
En los últimos años, la ex mandataria fue sobreseída en tres oportunidades por el presunto enriquecimiento ilícito que habría tenido en tres períodos puntuales. Una de las denuncias por el período 1995 a 2004 estuvo a cargo del juez Julián Ercolini, quien la cerró, lo que no fue apelado por el fiscal Eduardo Taiano. La segunda denuncia fue archivada por el juez Rodolfo Canicoba Corral, que investigó el presunto enriquecimiento ilícito del matrimonio Kirchner en los años 2005, 2006 y 2007.
Otra de las causas fue por el período 2008-2009, y la misma fue archivada por el juez Norberto Oyarbide, que investigó al matrimonio Kirchner por presunto enriquecimiento ilícito.
Días atrás, Rafecas se declaró incompetente para investigar presuntas maniobras de lavado de dinero en el caso Hotesur, la firma de la cual es socia Cristina. Según la denuncia, Hotesur, que explotaba el hotel Alto Calafate, alquiló habitaciones a la firma Valle Mitre del empresario Lázaro Báez, pero en verdad las mismas no eran ocupadas.
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