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Tenía 38 años

Investigan asesinato de fotógrafa que retrató las protestas y represión en Chile

El miércoles último dejó de atender el celular. La encontraron un día después, con signos de golpes y puñaladas, en su departamento del centro de Santiago. No estaban su cámara ni notebook. Sospechan vínculo entre el crimen y el compromiso profesional y personal de la víctima


Albertina Martínez Burgos tenía 38 años, trabajaba como asistente de iluminación en el canal de TV del multimedios chileno Mega y como fotógrafa independiente. Venía retratando las protestas en su país y los atropellos de los carabineros contra los manifestantes, en particular las mujeres. La encontraron muerta en la tarde de este jueves dentro de su departamento del centro de Santiago con signos de golpes y puñaladas. La Fiscalía de Chile investiga el caso como un homicidio. Sus allegados y familiares, junto a varias organizaciones sociales, reclaman celeridad a la Justicia y lanzaron las sospechas de un posible vínculo entre el crimen y su activismo profesional y personal.

Las primeras informaciones provenientes de los investigadores indican que la muerte de Albertina se constató cuando su pareja, al no poder contactarla, le pidió a la madre –suegra de la víctima– que se acercara al edificio Nueva Santa Elena para ver qué pasaba. La mujer tocó el portero. Como nadie contestó, llamó a un cerrajero. Cuando pudo entrar al departamento, encontró a la reportera gráfica muerta.

Un dato de relevancia es que en el lugar faltaban su cámara de fotos, su notebook y sus documentos. Tampoco había rastros de su trabajo de los últimos días sobre la agitación en las calles. Se trata de un material abundante, parte del cual volcaba en su cuenta de Facebook.

La fiscal Débora Quintana, de la Fiscalía Centro Norte de Santiago, ordenó desde el departamento de la víctima los primeros peritajes, la toma de declaración de testigos y el levantamiento de las grabaciones de cámaras de seguridad para determinar quién o quiénes pudieron entrar al departamento.


Albertina venía participando activamente, desde que comenzó el levantamiento popular en su país, con el registro de las marchas y movilizaciones, sobre todo las de la Plaza Italia, las más numerosas. Se enfocó en la represión y los abusos de los Carabineros y militares hacia las mujeres y entre ellas, en particular, a las comunicadoras.

Faltaban su cámara, notebook y registros de la represión

El movimiento “Ni una menos” de Chile destacó la extraña muerte de Albertina en sus redes sociales. “Estaba documentando la situación en Chile y participaba activamente como fotógrafa en las manifestaciones. Documentó la violencia hacia las mujeres periodistas y comunicadoras”, expresó el colectivo en su cuenta de Instagram.

“Hoy exigimos que se esclarezcan las causas de su muerte, sin dejar de mencionar que ni su computador ni cámara estaban en su departamento al momento de ser encontrada sin vida. No olvidemos su nombre, no olvidemos su rostro”, publicó Ni una Menos de Chile.

Esas mismas circunstancias de desaparición de herramientas de trabajo y material registrado fue enfatizada por la familia de la víctima.

El paradero de Martínez Burgos era desconocido desde el miércoles, cuando dejó de contestar su celular y de responder mensajes.

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