Edición Impresa

Política y economía

Habrá mega acto en octubre por el pago del Boden 2015

El kirchnerismo, sigilosamente, está preparando un acto de despedida económica de Cristina Fernández para unos días antes de las elecciones presidenciales del 25 de octubre. Será cuando se pague y cancele la deuda de unos 6.300 millones de dólares correspondientes al Boden (Bonos Operativos del Estado Nacional) 2015 con dinero que saldrá en su mayor parte de las reservas actuales del Banco Central. El acto, seguramente organizado en la Casa de Gobierno, se piensa para el jueves 1º o el lunes 5 de octubre, ya que el vencimiento del bono es el sábado 3 de octubre. Dado que el pago debe concretarse unos 20 días antes de las elecciones presidenciales, se lo piensa como la despedida ideal para mezclar la épica desendeudadora con que quiere quedar en la memoria el kirchnerismo, y el traspaso virtual del mando financiero a Daniel Scioli en medio de la campaña para elegir al sucesor de Cristina de Kirchner.

La intención es mostrar a la conducción económica del gobierno como firme en el dominio de la situación financiera que heredaría, de ganar las elecciones, el bonaerense. Y la aceptación de éste del “legado” de desendeudamiento que le dejarán Néstor y Cristina de Kirchner, aunque con reservas casi al límite.

Para el evento, el gobierno se viene preparando de manera firme, pero sin mayores estridencias. El hecho más importante es la recompra sostenida que en los últimos tiempos vino realizado el Ejecutivo a través del Banco Central (BCRA), de Alejandro Vanoli, y la Ansés, de Diego Bossio, fundamentalmente en los días de subas del “blue” y de inestabilidad cambiaria anterior a las Paso del 9 de agosto. Si bien el número de las recompras del título están bajo siete llaves, aseguran desde el Gabinete nacional que el monto sorprendería en el momento de hacerse público. Se habla de bastante más de 500 millones de dólares, dinero que implicaría un sufrimiento menor en cuanto a la pérdida de reservas, el dato que más estará mirando el mercado ese día del pago del bono.

El Boden 2015 es un título que estará ligado por siempre a la historia del kirchnerismo. Es el primer bono de deuda emitido por Néstor Kirchner en 2005, antes y después del primer canje de deuda, pero sin estar vinculado a la operación ejecutada por Roberto Lavagna y el ex secretario de Finanzas Guillermo Nielsen para salir del default. Está sí relacionado, en parte, con la deuda que en su momento compró el venezolano Hugo Chávez; y con las licitaciones de títulos que en 2005 el kirchnerismo realizó con bancos para cerrar operaciones por la pesificación asimétrica dispuesta por Eduardo Duhalde ante el sistema financiero. También hubo en aquel 2005 colocaciones de deuda voluntaria con bancos locales y extranjeros, que completaron la operación que finalmente se liquidará el próximo 3 de octubre.

El gobierno consiguió que durante sus 10 años de vida se paguen puntualmente intereses en forma semestral y que en octubre se liquide todo el capital al final. Se convirtió además en el bono estrella del sistema financiero en tiempos de cepo cambiario, a partir de la posibilidad de comprarlo en pesos para luego, el 3 de octubre, día del pago final y de amortización total del capital, convertirlo en dólares contantes y sonantes. Siempre cotizó durante los años kirchneristas a la sombra de su primo hermano mayor, el Boden 2012, que fue la primera opción del mercado para acceder a las divisas, situación que se aceleró luego de que en octubre de 2011 el gobierno comenzara a aplicar el cepo cambiario.

Puntualmente, pagó semestralmente intereses cada 3 de abril y de octubre, con rendimientos que llegaron hasta el 15 por ciento anual en dólares, lo que lo convirtió en un verdadero lujo durante toda su vida útil, conviviendo en tiempos donde la renta financiera en la divisa estadounidense fue más bien escasa.

El acto de octubre próximo podría ser incluso una réplica de otro organizado por el kirchnerismo el 3 de agosto de 2012, día en que se pagaron los 2.197 millones de dólares correspondientes a la última cuota de intereses del Boden 2012 que había sido emitido en 2002 para compensar a los ahorristas por los depósitos confiscados durante el corralito financiero. Ese día, Cristina de Kirchner, en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, presentó la liquidación como una victoria del país contra la peor crisis de la historia económica argentina. Se mencionó allí que la deuda en moneda extranjera quedaba reducida al 8,4 por ciento de las obligaciones y se oficializó el “fin del corralito”. El peso de la deuda pública se reducía al 41,8 por ciento del PBI, cuando en 2002 había llegado al 166 por ciento.

Ahora, luego de pago del Boden 2015, ese número se ubicaría cerca del 36 por ciento, el nivel más bajo en la historia de la democracia moderna.

Como además el pago de octubre próximo se dará en medio de la campaña electoral, la idea es que se presente como el momento cúlmine del intento del oficialismo de conquistar, al menos económicamente, al votante independiente. Es una forma de llevar a la realidad la máxima de la que el sciolismo y el kirchnerismo hablan en estos días: “¿Cómo hacer para que el independiente que paga Ganancias nos vote?”.

Comentarios

10