Esa rueda que giraba siempre en negativo, como dijo Lucas Bernardi alguna vez, cambió de sentido. Desde la entrega y la solidaridad que el equipo puso en los últimos partidos. Desde la recuperación de la confianza para jugar un poco mejor, como anoche ante Estudiantes, al que venció por 2-0 en La Plata. Y desde la suerte que lo acompañó en el Estadio Único como hacía tiempo no sucedía.
Golpeó de arranque. Llegó al área de Estudiantes y metió el primero cuando en el partido no había pasado nada. Lucas Boyé se escapó de la marca y metió el cabezazo tras centro de Denis Rodríguez. No logró aprovecharse antes de la defensa de Estudiantes (que entregó todas las facilidades posibles) porque Hilario Navarro se lo tapó a Boyé enseguida y porque Martín Tonso lo erró abajo del arco luego de una pelota cruzada de Lucas Mugni.
Estudiantes intentó algo por derecha con el desequilibrio de Ezequiel Cerruti, pero durante la primera parte no pudo con un Newell’s que supo ser solidario para replegarse y achicarle espacios al rival. Y que también tuvo mucha movilidad para generarlos cuando recuperaba la pelota. La rotación de los volantes (a excepción de Diego Mateo) y Boyé (cóctel de velocidad y habilidad) fue permanente. Y se volvió un acertijo difícil de resolver para el Pincha.
En ese marco llegó el segundo, tras tejer una de las mejores jugadas colectivas de este ciclo: participaron Gabriel Báez, Lucas Mugni, Maxi Rodríguez y Denis Rodríguez, quien sacó un terrible derechazo que dio en el travesaño y se metió.
La suerte le hizo un guiño apenas empezó el complemento: Báez lo tumbó a Cerruti en el área, pero Ezequiel Unsain alcanzó a rozar el penal que ejecutó Diego Mendoza y la pelota dio en el travesaño.
La Lepra necesitó de un par de intervenciones de su joven arquero para mantener el cero, porque Estudiantes quemó las naves en busca del descuento. Y del esfuerzo del resto, porque tuvo que defenderse sin la pelota hasta que pasó el sofocón. Así volvió a festejar fuera de casa. Y demostró que algo cambió.
Hubo aguante en las tribunas
No importó que fuera lunes por la noche. Tampoco que el equipo no esté en las posiciones de privilegio. Pudieron más las ganas de volver a viajar después de tanto para acompañar a Newell’s. Y así lo hicieron los seis mil rojinegros que anoche dijeron presente en La Plata, en uno de los partidos de la fecha que contó con público visitante (NdR: el otro fue Lanús ante Independiente).
Desde temprano hubo previa en los alrededores del Parque Independencia. De ahí salieron 21 micros completos que llegaron a la ciudad de las diagonales cerca de las 19. Por eso no sorprendió ver hinchas leprosas en las cercanías del Estadio Único comiendo algo para amenizar la espera después de tanto tiempo.
La última vez había sido por la Copa Argentina ante Talleres en Rafaela. Porque este año frente a Chacarita, por el mismo certamen, fue a puertas cerradas. Y el último antecedente de hinchas visitantes en el torneo local fue en el tramo final del Torneo Final 2013 en el que Newell’s se coronó. En el medio de todo eso, los hinchas rojinegros pudieron acompañar al equipo en la Copa Libertadores y en la Superfinal ante Vélez en Mendoza.
Lo cierto es que había ansiedad en los hinchas leprosos por volver a viajar. Se percibió en la venta de entradas que arrancó en Rosario el miércoles de la semana pasada y que rápidamente se fueron agotando. De hecho, ayer a último momento se dispuso que hubiera expendio de localidades en el Estadio Único para cumplir con la demanda.
Los hinchas no podían fallar. Por eso salieron en caravana para acompañar al equipo en el torneo local después de un buen tiempo. Y no tuvieron demasiado en cuenta el día, la hora y mucho menos la posición de Newell’s en la tabla. Porque, como dice la canción, al equipo se lo banca “en las buenas y en las malas mucho más”.
Uno por uno leproso
Ezequiel Unsain (8): fue clave en la victoria gracias a sus intervenciones. La rozó en el penal, le tapó una muy buena a Luciano Acosta. Enorme seguridad.
Franco Escobar (5): aplicado en la marca, casi no pasó al ataque. Se soltó un poco más en el complemento.
Marcos Cáceres (5): se impuso en la lucha cuerpo a cuerpo y no pasó grandes sobresaltos.
Nehuén Paz (5,5): hizo la simple y evitó complicarse. Correcto para defender.
Gabriel Báez (5): la tuvo difícil en con Ezequiel Cerutti. Cometió el penal y participó en el segundo tanto.
Denis Rodríguez (7): hizo alguna de más lo que le valió el reto de su primo. Pero se reivindicó con un golazo. Y tiró el córner en el primero.
Diego Mateo (5,5): estuvo algo solo en el segundo tiempo hasta que el equipo se acomodó mejor. A veces sale a cortar lejos, pero es clave en las coberturas.
Lucas Mugni (6): armó una linda sociedad con Lucas Boyé. Buen pie y panorama. Y sacrificio.
Martín Tonso (4): si supiera definir hubiera sido la figura del encuentro. Todo lo bueno que hace desde la entrega lo dilapida en el área rival.
Lucas Boyé (8): hizo un primer tiempo bárbaro. Arrancó en positivo con un buen cabezazo para el primer tanto. Complicó a la defensa rival con su movilidad y dominio. Pudo hacer otro pero se lo tapó Hilario Navarro.
Maxi Rodríguez (5): se enojó con razón cuando sus compañeros no se la dieron y la perdieron por hacer una de más. Además de la entrega, se la devolvió de cabeza a su primo en el segundo gol leproso.
Mauricio Tevez (-): entró para darle profundidad al ataque por la derecha y lo logró por momentos.
Braian Rivero (-): casi no la tocó en su debut en primera.
Mauro Formica (-): ingresó cuando el partido terminaba.
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