La justicia y la Cancillería argentina iniciaron gestiones para concretar la extradición desde Brasil del represor prófugo Manuel Cordero Piacentini, dijeron hoy fuentes judiciales. Cordero, un capitán retirado del ejército uruguayo, debía ser indagado hoy en esta capital por el juez Norberto Oyarbide, quien investiga la causa del “Plan Condor” de colaboración represiva de dictaduras latinoamericanas.
Pero el miércoles, horas antes de concretarse su entrega por la INTERPOL brasileña en el paso fronterizo Uruguayana-Paso de los Libres, Cordero fue internado en el Hospital Santanense de Santana do Livramento, a raíz de una arritmia.
Fuentes del juzgado federal 7 dijeron que Oyarbide envió una nota a Brasilia manifestando disposición a “garantizar la salud del requerido” en Buenos Aires.
“También libramos un oficio a la Cancillería, que tomó cartas en el asunto”, añadió la fuente.
Cordero está imputado de acusado de haber actuado como torturador en el centro clandestino de detención Automotores Oreletti, y de haberlo hecho, entre otros, con de María Claudia García Iruretagoyena de Gelman, nuera del poeta Juan Gelman, trasladada luego a Montevideo y asesinada tras dar a luz.
La extradición de Cordero fue aprobada el 6 de agosto de 2008 por el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, tras un dilatado proceso iniciado en febrero de 2007, cuando fue detenido en esa ciudad fronteriza tras fugarse de Uruguay en 2004 para eludir un juicio por desacato.
Esta mañana permanecía bajo custodia de la Policía Federal brasileña a la espera de la realización de un chequeo médico que habilitara su extradición a la Argentina. Pero la defensa pidió que sea llevado a una clínica especializada de Porto Alegre, distante a casi 500 kilómetros de la frontera.
Por la causa del Plan Cóndor también están imputados, entre otros, el dictador Jorge Videla, el agente de inteligencia Raúl Guglielminetti y el Jorge “Tigre” Acosta”.
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