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Femicidio de Marina Espíndola: separan a tres policías de Murphy por no aplicar protocolo de género

Se trata del comisario de la seccional, el jefe de la Unidad Judiciales y la psicóloga de Medicina Legal, a quienes se les abrió una investigación por no intervenir ante la denuncia que había presentado la víctima en noviembre por violencia de género contra su ex pareja, un policía de esa localidad


Tres policías de la localidad de Murphy fueron pasados este viernes a disponibilidad tras constatarse “el no cumplimiento del protocolo de género” en el femicidio de Marina Espíndola, asesinada el martes último por su ex pareja, también efectivo de la misma fuerza y a quien ella había denunciado hacía dos meses por violencia de género. Esta decisión se da en la víspera de la marcha organizada para este viernes a las 10 por organizaciones de mujeres en la capital provincial para exigir a los ministerios de Género y de Seguridad que den explicaciones tanto las medidas y protocolos que se aplican como también las medidas de prevención futuras para la violencia de género.

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A través de un comunicado, el Ministerio de Seguridad de Santa Fe indicó que la medida recayó sobre el comisario inspector Cristian Ataide, quien estaba a cargo de la subcomisaría 10ª de la mencionada localidad del departamento General López; el subdirector de Policía Cristian Rotela, jefe de la Unidad Judiciales; y la psicóloga Rosalía Kobila, de Medicina Legal.

Los tres quedaron involucrados en una investigación administrativa por el femicidio de Marina Carmen Espíndola, de 42 años, cometido el último martes por su ex pareja, un policía identificado como Gabriel Robles, de 49, quien luego de dispararle en la cabeza con su arma reglamentaria y matarla, se quitó la vida con un tiro en la boca.

De acuerdo a la pesquisa, Marina, que residía con sus tres hijos de una pareja anterior, había denunciado a Robles en noviembre pasado.

Según explicó el fiscal del caso, Horacio Pueyrredón, la víctima denunció entonces que su ex pareja “la molestaba” porque quería continuar la una relación que ella ya había dado por terminada.

Robles, quien prestaba servicios en Melincué, cometió el femicidio alrededor de las 2 del martes cuando llegó al domicilio de la víctima y le disparó en la cabeza, delante de uno de los hijos de la mujer de 11 años. Luego se pegó un tiro en la boca y falleció en el hospital de Venado Tuerto, explicaron los voceros en dicha oportunidad.

Tras conocerse la denuncia que había hecho la víctima dos meses antes del crimen, el Ministerio de Seguridad decidió este viernes pasar a disponibilidad a los policías que actuaron sin cumplir los lineamientos establecidos en un protocolo de género diseñado a esos fines, que está en vigencia desde octubre pasado.

“El Ministerio abrió una investigación y corrió de sus funciones al personal policial de forma preventiva, para seguir con el proceso investigativo y administrativo para el esclarecimiento del caso”, se sostuvo desde la cartera conducida por Jorge Lagna.

Además, se indicó que “se puso en conocimiento que en los procedimientos se detectó el no cumplimiento del protocolo de género que fue firmado en octubre del 2021”.

Paralelamente, funcionarias del área de Bienestar Policial y Género establecieron “una mesa de trabajo” con la comuna de Murphy, y programaron una capacitación con perspectiva de género para la toma de denuncias, destinada al personal de la comisaría”.

El ministro Langa dispuso, por otra parte, que la oficial María Laura Martinotti quede a cargo de la comisaría de esa localidad, ubicada a 150 kilómetros al sudoeste de Rosario, y designó a otra oficial como subjefa.

El pañuelo del Ni Una Menos

En ese marco, allegados, conocidos y familiares de la mujer se convocaron de forma espontánea el mismo martes por la tarde frente a la subcomisaría de Murphy donde reclamaron porque el femicida Robles continuaba con la pistola calibre 9 milímetros reglamentaria, a pesar de la denuncia en su contra.

Una foto que se viralizó de esa manifestación fue la de una mujer policía con el pañuelo violeta, que representa la lucha contra la violencia machista bajo el Ni Una Menos, el cual fue acercado por una de la manifestantes.

La uniformada que se sumó fue Melina Evelin Di Marco, quien se desempeña actualmente en la Unidad Regional VIII, del departamento General López. Fue ex comisaria en Melincué y en la actualidad, presta funciones en la comisaría 4ª de Firmat.

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