El gobernador Antonio Bonfatti mantuvo ayer una reunión con el ministro del Interior y de Transporte, Florencio Randazzo, con quien avanzó en cuestiones relacionadas con la puesta en marcha del nuevo servicio ferroviario que unirá a las ciudades de Buenos Aires y Rosario. El encuentro se desarrolló en la Casa Rosada y del mismo participó también el ministro de Economía de la provincia, Ángel Sciara.
Tras confirmar la llegada del funcionario nacional a la ciudad de Rosario –prevista para el 21 de enero– para reunirse con los equipos del gobierno provincial, el gobernador anticipó que ese mismo día se aprovechará “para explorar los puntos que podrían ser el destino final de los trenes en Rosario, algo que tenemos que articular con la Intendencia en base a un plano urbanístico y a las condiciones que se determinen entre los gobiernos nacional, provincial y municipal”.
Randazzo, por su parte, especificó: “Hoy, junto a Antonio, avanzamos en lo que será el ingreso y la estación de destino del tren y repasamos el trabajo de renovación de vías que estamos ejecutando en los once obradores para reactivar cuanto antes este ramal que es estratégico para unir dos de las principales ciudades del país”.
“Estamos renovando las vías de manera que el próximo año podamos poner en marcha los nuevos trenes que ya están llegando al país”, agregó el ministro de Interior y Transporte. En este sentido, el funcionario nacional expresó que de los 220 equipos adquiridos para prestar servicios en las líneas de larga distancia “ya llegaron 117 formaciones”.
Las obras licitadas para renovar el ramal Rosario-Retiro cuentan con un plazo de ejecución de obra de dieciocho meses y demandarán una inversión de 2.500 millones de pesos. Los coches que harán el trayecto fueron adquiridos en China.
El senador provincial y ex intendente Miguel Lifschitz, consultado al respecto, consideró que se trata de “una obra de enorme impacto para toda la región, no sólo para Rosario”, y especialmente para el sur de Santa Fe y para todas las localidades ubicadas entre Rosario y Buenos Aires.
“Son núcleos importantes, con movimiento económico e industrial, y esta conexión ferroviaria los va a potenciar”, aseguró.
Por su parte, el subsecretario de Planeamiento de la Municipalidad, Eduardo González, recordó que “este proyecto se repite desde la década del 60. Es un viejo anhelo de toda la ciudad que podamos tener una conexión ferrovial y la ciudad está preparada para recibirla”, remarcó.
Rolando Maggi, integrante de la Asociación Rosarina Amigos del Riel, también consultado, puntualizó: “Queremos que se cumplan las metas establecidas en los pliegos licitatorios, y cuanto antes tengamos restablecido el servicio de trenes Rosario- Buenos Aires, con la jerarquía que se requiere, se cumplirá con un proyecto tan deseado”.
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