El Concejo Municipal aprobó la norma para regular la utilización de agrotóxicos en la ciudad y que fija una frontera agronómica en el ejido urbano.
El texto prevé proteger el trabajo y la salud humana estableciendo diferentes categorías de productores, horticultores y fruticultores, en tanto propende al uso de buenas prácticas y la creación de barreras forestales, entre otros recaudos.
La norma se encuentra respaldada por el artículo 41 de la Constitución Nacional, que expresa que todos los habitantes gozan del derecho a un ambiente sano, equilibrado, apto para el desarrollo humano y para que las actividades productivas satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras, y tienen el deber de preservarlo.
Mediante un proyecto de ordenanza, el Concejo Municipal había solicitado al Ejecutivo crear una Oficina Municipal para el Control de las Fumigaciones, la cual deberá contar con un 0800 para que la población pueda comunicar sus inquietudes o realizar denuncias sobre prácticas que violen la norma, y también con una guardia pasiva las 24hs.
De este modo, la ordenanza crea un Comité Ejecutivo de Coordinación y Acción integrado por la Subsecretaría de Medio Ambiente y la Secretaría de Salud, entre otras, para confeccionar luego un Registro Único de Productores Agrícolas, Frutihortícolas, Pecuarios y Huerteros que operen en la ciudad.
También se instrumentará un mapa online de las actividades que se realizan en la ciudad y contará con información sobre el tipo de producciones que se realizan, la cantidad de productores dedicados a cada tipo de producción, las zonas protegidas, y toda información importante sobre el tema.
Uno de los artículos prohíbe la circulación de transportes con elementos agroquímicos, salvo aquellos que dispongan de una hoja de ruta con trayectos y sustancias determinados, según consignará el Departamento Ejecutivo.
Además, se regula la utilización de envases y se limita la radicación de depósitos con productos fitosanitarios, en tanto los ya instalados deberán adecuarse a la nueva ordenanza.
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