Lo pudo haber ganado Central, hizo un primer tiempo de alto vuelo. En ese período, superó con claridad a Defensa y Justicia, generó situaciones y marcó dos goles. Y también lo pudo haber perdido el Canalla. El Halcón lo vulneró en el complemento, y le desnudó notables falencias defensivas. Pero el partido terminó en empate. En Florencio Varela hubo reparto de puntos en un cotejo colmado de matices: aciertos, errores, emociones y vértigo.
Fue 3 a 3. Y el empate final le permitió equipo de Eduardo Coudet estirar su invicto y, aunque con un partido más, alcanzar a San Lorenzo en la punta del torneo.
Arrancó muy metido Central. Con Delgado y Cervi muy participativos, el Canalla se hizo protagonista rápidamente. Domínguez equilibró desde el medio, Fernández fue opción de pase constante, Aguirre desniveló por izquierda y Ruben exigió dentro del área. Así, Central gestó en el primer tiempo, penal fallado incluido, cinco situaciones muy claras de gol.
Pero el primer tiempo sólo terminó 2 a 1 a favor de los auriazules. Tal vez ese, el de no haber aprovechado mejor esas chances, haya sido el peor pecado cometido de parte de los de Coudet para entender el resultado final.
Es que para el complemento, Franco movió piezas. Y Defensa salió a jugar con mayor agresividad. Estos factores, sumado a que Central retrocedió en el terreno, le permitieron al local emparejar el trámite. El partido se hizo de ida y vuelta. Lo empató El Halcón, recuperó la ventaja el Canalla, lo volvió a igualar Defensa.
Faltaban diez minutos y estaba para cualquiera. Ya no había dominador. Pero fue el de Florencio Varela el que dispuso las mejores oportunidades para ganar en el cierre, pero no las aprovechó.
Aquel arranque triunfal del Canalla, con cinco victorias al hilo, va quedando atrás. Ahora son tres empates consecutivos, y la sensación de que el equipo quiere más de lo que puede. Ayer hizo tres goles como visitante, y no ganó. Fue tres veces arriba en el marcador, y casi pierde. La propuesta seduce, reducir el margen de error parece impostergable para volver a la vereda de los éxitos.
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