Un sacerdote de 51 años comenzó a ser juzgado este jueves en los tribunales de Reconquista por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por producir un grave daño en la salud y por ser ministro de un culto religioso reconocido de dos menores de cuatro años en 2015. A partir de las 7, se concentraron agrupaciones de mujeres con carteles en apoyo a las víctimas y sus familias, también estuvieron presentes familiares y amigos del cura.
El acusado, identificado como Néstor Fabián Monzón, se sentó en el banquillo este jueves a partir de las 8 ante el tribunal –integrado por la magistrada Claudia Bressán (presidenta) junto a los jueces Santiago Banegas y Martín Gauna Chapero–, indicaron voceros judiciales. La querella en representación de la familia de las víctimas –un nene y una nena, menores de cuatro años al momento de los abusos– está a cargo de los letrados Andrés Santos Ghio, Andrés Atilio Ramseyer junto a la abogada Luciana González, quienes solicitaron la pena de 16 años de prisión.
En tanto, la Fiscalía está representada por Alejandro Rodríguez y Sebastián Marichal, quienes pidieron 12 años de cárcel.
El caso y las palabras del fiscal
Desde el Ministerio Público de la Acusación señalaron que “la investigación se inició a raíz de una denuncia realizada por la madre de la niña, de entonces 3 años. La mujer se presentó el 23 de diciembre de 2015 en el Centro de Orientación a la Víctima de Violencia Familiar y Sexual de la Unidad Regional IX, Departamento Obligado y dejó constancia de lo ocurrido.
“Ni bien se nos informó de la denuncia, junto al fiscal Rubén Martínez ordenamos la realización de diversas diligencias, testimoniales y pericias. También se entrevistó en cámara Gesell a la niña, ya que con el niño –de 3 años–no se pudo concretar”, recordó el fiscal, que además remarcó que tuvieron que presentar “numerosos escritos y participar de una gran cantidad de audiencias a raíz de los recursos interpuestos” por la defensa del acusado, representado por el letrado Ricardo Degoumois.
El fiscal Rodríguez comenzó esta jornada con una reconstrucción de los abusos investigados y explicó que fueron cometidos entre el jueves 26 y el viernes 27 de noviembre de 2015 en una casa perteneciente a la diócesis de Reconquista –en la que vivía el acusado– ubicada dentro del predio de la Parroquia María Madre de Dios, de Reconquista. “En esta sede religiosa el hombre investigado cumplía funciones como sacerdote. Las víctimas fueron una niña y un niño muy pequeños, a quienes no sólo sometió sexualmente, sino que también hizo que se observaran mutuamente mientras eran abusados”, sostuvo el fiscal.
Además, el representante del Ministerio Público de la Acusación (MPA) describió que sobre los agravantes imputados a Monzón, además de su condición de ministro de un culto religioso, hubo daño en la salud de una de las víctimas, la nena, quien “contrajo una enfermedad de transmisión sexual, la cual fue corroborada por los estudios médicos”.
Para el fiscal Rodríguez “no quedan dudas que el sacerdote desplegó una acción tendiente a cometer los abusos sexuales en circunstancias que son gravemente ultrajantes para las víctimas, en franco desprecio de la dignidad de ambos y siempre comprendiendo la irregularidad e ilicitud de lo que estaba haciendo. Además los abusos sexuales generan consecuencias perjudiciales que dañan severamente el desarrollo afectivo, cognitivo y sexual de las personas, más aún cuando las víctimas son tan pequeñas”.
Voceros del MPA de Santa Fe agregaron que la sentencia se dará a conocer el martes 17 de diciembre próximo al mediodía en el edificio de los Tribunales de Reconquista, ubicado en San Martín 1153.
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