El oficialismo consiguió aprobar en el Senado y convertir en ley con 41 votos a favor y 9 en contra el proyecto que impone nuevos gravámenes para compensar los menores ingresos por la suba del mínimo no imponible de Ganancias.
El oficialismo aprobó en soledad la nueva ley fue grava la distribución de dividendos y la compraventa de títulos valores que no cotizan en Bolsa, mientras que el Peronismo Federal y el Frente Amplio Progresista (FAP) votaron en contra y la UCR se retiró de la sesión.
La iniciativa enviada por el Ejecutivo grava con un impuesto del 10 por ciento la distribución de dividendos y otro del 15 por ciento la compra venta de títulos valores que no cotizan en la Bolsa.
Con estas alícuotas, el Estado prevé recaudar unos $ 2.000 millones para cubrir parcialmente los $ 4.500 millones que le cuesta la modificación del Impuesto a las Ganancias.
Previo a comenzar la discusión de las iniciativas, el bloque de la UCR se retiró del recinto con duras críticas al titular de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, quien ayer se cruzó duro con el jujeño Gerardo Morales y hoy volvió a criticarlo.
“Recalde no es un hombre de bien, no es educado. Lo que hizo hoy, ratificando lo había dicho, doblando la apuesta, lo hace por impunidad, es la misma impunidad con la que se avala a funcionarios de esta calaña. No vamos a formar parte de esta sesión y como queja nos vamos retirar del recinto”, afirmó el presidente del bloque radical en la Cámara alta, José Cano.
Ayer, Recalde concurrió al Senado a brindar un informe sobre su gestión al frente de Aerolíneas Argentinas. En el inicio de su exposición ante las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Infraestructura, Vivienda y Transporte del Senado, el funcionario pidió “respeto” a los senadores. A la hora de las preguntas, el clima se tenso entre el titular de la línea de bandera y el senador jujeño.
El disparador del cruce fue un video fechada en 2010, pero que se conoció semanas atrás, donde Recalde llama a Morales y al senador Adolfo Rodríguez Saá “manga de záganos”.
“Pensé que iba a empezar pidiendo disculpas”, dijo al tomar la palabra el radical, para agregar que al funcionario “no le da para empezar por donde debería empezar”.
“Usted es un cobarde, que tendría que pedir disculpas. Y no sea hipócrita, porque usted viene acá y nos dice una cosa y después nos agravia en otro acto”, le esgrimió Morales.
El titular del bloque kirchnerista, Miguel Ángel Pichetto, ya había pedido disculpas en nombre del titular de Aerolíneas Argentinas durante la última sesión del Senado por éstos dichos.
Acto seguido, la senadora por San Luis Liliana Negre de Alonso calificó de “lamentables” los dichos de Recalde, quien en el video da a entender que no estaba obligado a “rendir cuentas” ante el Congreso.
“Tendría que haber empezado con una disculpa”, dijo. “Puede haber sido en un acto electoral, ahora lo que se dice es lo que se siente”, añadió, al sostener que “despreció” a esa institución.
Las críticas contra Recalde aumentaban cuando salió Pichetto en su defensa.
“Las palabras de Recalde han sido comenzar respetando y valorando las opiniones de los legisladores. Así que me parece que esto salda la cuestión”, indicó. Y añadió: “Ustedes son hombres de la política, muchos habrán dicho cosas inoportunas que quedan en el fragor de la cuestión”.
No contento con la explicación, Morales indicó que sólo aceptaría un pedido de interrupción de Recalde si ofrecía disculpas. “Le exijo que nos pida disculpas, porque siempre lo tratamos bien”, insistió.
“Senador Morales, con todo el respeto que merece, usted no entendió nada de lo que le dije”, dijo Recalde. De fondo, el jujeño le gritaba que no era “hombre de bien” y lo instó a pedir disculpas.
Los gritos del radical obligaron al senador Aníbal Fernández a interrumpir y pedir calma.
“Si en algún momento alguien sintió que se afectaba la investidura, pido disculpas”, respondió el titular de Aerolíneas. Y cargó contra Morales: “No creo que contribuya al prestigio de la investidura que me amenace.Usted debería pedir disculpas también, porque usted usó palabras más soeces que el animalito con el que yo lo comparé. Me ha dicho corrupto e impresentable”.
“No es de cobarde ni de hipócrita que uno se dirija con respeto en estas sesiones. Creo que lo cortés no quita lo valiente y lo institucional es lo que corresponde”, culminó.
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