Santiago Baabdaty es un argentino que vive en EEUU hace 24 años. Este viernes, su hijo Austin, de 7 años, salvó su vida de milagro cuando lo rescató la policía. El pequeño es integrante del segundo grado de la escuela que fue víctima de un ataque que dejó 27 muertos.
En diálogo con el canal Todo Noticias, el cordobés de 49 años señaló: “Mi hijo ahora está conmigo en el mi lugar de trabajo. Está más relajado. Entiende lo que pasó, pero no se da cuenta de la magnitud”.
Baabdaty emigró al país del norte en 1988. “Me vine a EEUU para vivir un poco más tranquilo. Acá dejábamos los autos abiertos, con las llaves puestas. Pero ahora voy a vivir trancando todo”, relató el argentino, en un claro panorama de su situación.
Austin va a segundo grado, y su pequeño hermano, de poco más de 3 años, asiste a un jardín que está al lado del colegio atacado, según contó el propio padre.
“Me dijo que había escuchado gritos, ruidos y que estaba asustado, pero nada más”, explicó el cordobés. Además, dijo que no conoce “personalmente ni a la maestra ni al director”.
“Las autoridades todavía no nos han dado nada. Uno quisiera poder salir y controlar la situación”, apuntó Baabdaty.
Por último, el argentino explicó un tema esencial en este caso: “Acá hay negocios de armas por todos lados. No se bien porque a mí no me gustan, pero me imagino que es fácil”.
Más temprano, ámbito.com dialogó con Roxana, una argentina que vive cerca del lugar. “Esta situación es horrible, espantosa, llena de incertidumbre. Son niños, estamos muy consternados”, describió.
Hace 10 años que vive en EEUU, y contó que en principio no hay argentinos entre las víctimas, aunque “aún no sabemos nacionalidades. Yo tengo una compatriota cerca, que la llamé hace un rato, pero no tiene hijos en la escuela”.
Roxana no sale de asombro, porque Newtown es un “pueblo tranquilo. Hay violencia como en todos lados, pero eso es más de las grandes ciudades, como Hartford, la capital, o New Heaven, otra de las ciudades más importantes”.
Además, confirmó que “la policía está custodiando el lugar, y también las otras de la ciudad, por precaución de que no vuelva a pasar lo mismo”.
En medio del dolor, el parque central de la capital Hartford permanecerá cerrado toda la noche, sin sus tradicionales luces, en señal de luto.
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