Edición Impresa

El derrame está bajo control

La petrolera británica sostuvo que está logrando juntar gran parte del crudo volcado al mar. En tanto, la Casa Blanca prometió ayudar a damnificados y se mostró enfurecida con la multinacional.

La empresa British Petroleum (BP) sostuvo ayer que logró controlar el derrame con la utilización de un embudo. En tanto, el presidente estadounidense, Barack Obama, prometió una vez más utilizar “todos los recursos” a su alcance para ayudar a los damnificados en el Golfo de México a recuperarse de la peor catástrofe ecológica en la historia del país provocada por un escape de crudo que llegó a las playas de Florida.

“Continuaremos valorando todos los recursos a nuestra disposición para proteger la costa, limpiando el petróleo, haciendo pagar a BP y otras empresas por la responsabilidad de los daños, recuperando la belleza de esta región y ayudando a los trabajadores del Golfo de México a reconstruir sus empresas”, señaló Obama en su programa semanal de radio, desde Grand Isle, una comunidad en Luisiana.

Las declaraciones de Obama ocurrieron en momentos en que BP, la empresa responsable de la tragedia, aseguró que por primera vez empieza a controlar el derrame, que ya lleva volcado al mar unos 80 millones de litros de crudo, más de un mes después de que se hundiera la plataforma Deepwater Horizon, tras una explosión a 80 kilómetros de Luisiana, que provocó 11 muertos.

Al inicio de su tercera visita a Luisiana desde el 22 de abril, cuando se hundió la plataforma, Obama declaró estar furioso por la contaminación en el Golfo de México y acusó a BP de no tener en cuenta “las consecuencias de sus acciones”.

BP “tiene obligaciones morales y legales aquí, en el Golfo”, dijo Obama. “Esta situación me enfurece porque demuestra que alguien no pensó en las consecuencias de sus acciones”, añadió.

El presidente estadounidense debió cancelar por segunda vez un viaje previsto a Australia e Indonesia, por la magnitud del desastre.

Para Obama, la catástrofe se convirtió en un grave problema que amenaza con arrastrarle en las encuestas de popularidad y podría eclipsar cualquier otro logro de su gestión. La televisión y los diarios mostraban chocantes imágenes de pelícanos y otras aves marinas empetroladas a lo largo de la costa de Luisiana.

Unas 60 aves marinas fueron encontradas el jueves cubiertas por una capa de petróleo en la isla Queen Bess en Luisiana.

BP logró colocar un dispositivo –similar a un embudo– sobre la fuga de crudo (a 1,6 kilómetros bajo el nivel del mar) que captura unos 1.000 barriles de petróleo (160.000 litros) al día, cuando se estima que la fuga es entre dos y tres millones de litros diarios.

De todas maneras, BP subrayó que si bien la solución es temporal, logrará capturar la “gran mayoría” del crudo derramado. Hasta ahora BP fracasó en todos los intentos por detener la continua fuga de crudo.

El gigante petrolero anunció anteayer que este mes enviará un segundo pago a personas y empresas afectadas por el derrame petrolífero. Con este segundo pago, BP calcula que habrá gastado unos 84 millones de dólares. El gobernador de Florida reclamó además un pago de 100 millones.

Comentarios