Con exposiciones de los economistas Orlando Ferreres y José Luis Espert comenzó ayer en la Bolsa de Comercio de Rosario el XI Congreso de Economía provincial, convocado esta vez bajo la consigna “desafíos de la próxima década”. Participó del mismo panel, “Economía post electoral: alternativas, desafíos y peligros”, el director académico de la Fundación Libertad, Walter Castro. El congreso continúa hoy con diferentes exposiciones.
Tras las palabras de apertura de la secretaria de Producción municipal, Eleonora Scagliotti, las disertaciones de los economistas porteños apuntaron a un repaso de las principales variables macroeconómicas en el final del gobierno kirchnerista, y las posibles políticas a aplicar por parte de los principales candidatos a la presidencia.
Ambos economistas criticaron el desequilibrio fiscal, las retenciones, el atraso en el tipo de cambio, entre otros ítems, al tiempo que imaginaron dos salidas al escenario actual: una tipo shock y otra gradual. Ambos se mostraron a favor de la primera, pero reconocieron que ninguno de los candidatos presidenciales parece dispuesto a implementar un ajuste radical, el que ellos consideraron como inexorable.
“Es lo que hay”, dijo Ferreres en un momento de su charla refiriéndose a la resistencia de los candidatos a practicar una política económica de shock, con el sinceramiento de variables que, según Ferreres y Espert, están atrasadas o desfasadas.
En su disertación, Espert sostuvo: “No hay un Estado en el mundo que recaude como este. La gran responsable de que la Argentina viva en estado de déficit permanente es la clase dirigente y la sociedad que lo convalida”.
Y agregó: “El déficit fiscal es el 8 por ciento del PBI. Es de punto de inflexión, de quiebre de tendencia. Otro quiebre de tendencia será el tipo de cambio. El atraso cambiario que tiene hoy la Argentina es el segundo más grande de los últimos años”.
Además, Espert se refirió a los posibles escenarios que se pueden vislumbrar tras las elecciones: “La continuidad sin cambios nos llevará a una crisis. Un plan B es hacer algún cambio pero no profundo: gradualismo. En el mejor de los casos, nos va a dejar discutiendo cómo hacemos para crecer. Esto nos llevará a una crisis. La única alternativa es el plan A, consistente, contundente y creíble. Sería asumir la imposibilidad de seguir con este déficit fiscal, que no sólo es histórico sino que hay otro problema que es que el gasto es el 50 por ciento del producto”.
Por su lado, Ferreres dijo que la agenda económica hoy pasa por el déficit fiscal y el tipo de cambio. “Un plan económico tiene que arrancar por el empleo y la pobreza. Hoy tenemos un 28 por ciento de pobreza y un desempleo encubierto por el Estado”.
Para Ferreres, el panorama poselectoral será el siguiente: “Lo más probable es que sea gradual el cambio. Es una probabilidad del 60 por ciento”. Y añadió: “La inflación es mayor que el aumento salarial. Hasta el turismo nos da pérdidas. El tipo de cambio real multilateral está más bajo que el de la convertibilidad. El escenario probable es el gradual con inflación alta, con reducción del déficit y sin mejora del salario real”.
A su turno, y antes de las preguntas, Castro dejó de lado las variables económicas y se dedicó a describir lo que definió como el “modelo de contrato social del kirchnerismo”.
“Argentina es el país de la región que menos aumentó las reservas en los últimos diez años y en el que más cayó el valor de las empresas. Cayó la producción de gas, petróleo y aumentó el déficit fiscal. Son pocos los del sector privado registrado y cada vez más gente del Estado. ¿Cómo se mantiene esto?”, se preguntó Castro.
Además, se refirió a la “grieta” que dejará el actual Poder Ejecutivo y dijo: “Este gobierno va a dejar una segunda grieta, la de la confrontación. Puja distributiva. La zona de consenso en los países civilizados está más abajo. Hay que encontrar grandes consensos sociales”.
Otros paneles
Terminado este primer panel, llegó el turno de los periodistas Ceferino Reato y Silvia Mercado, autores de los libros Doce noches y El relato peronista, quienes fueron presentados por el periodista local Raúl Acosta.
Posteriormente, volvió la economía al primer plano, esta vez con la presencia de Martín Tetaz y Javier Milei, quienes presentados por el economista local Leandro Fisanotti disertaron sobre “la economía del futuro”.
Por la tarde, el ex consejero de la Magistratura Alejandro Fargosi, y los constitucionalistas Daniel Sabsay e Iván Cullen realizaron un balance del gobierno kirchnerista desde una mirada legal e institucional.
En el final de la jornada, los analistas Roberto Starke, Enrique Zuleta Puceiro, Claudio Fantini y Pablo Knopoff disertaron sobre “cambio o continuidad, las posibilidades del próximo gobierno”.
Debates para el cierre
El Congreso de Economía culminará hoy con la realización de varios paneles de debate.
A las 9.15 está convocada la charla sobre “El rol de la Justicia frente a la política”, que contará con la participación de los jueces federales Claudio Bonadio y Luis María Cabral.
Bajo el formato de “entrevistas públicas”, a las 15.15 el diputado electo Rodrigo López Molina (PRO-Cambiemos) y Pablo Javkin (CC-Frente Progresista), más el candidato a diputado Alejandro Grandinetti (Frente Renovador-UNA), responderán sobre “nuevas visiones políticas para Rosario y Santa Fe”.
A las 16.15 y bajo el título “Demandas santafesinas para el Senado”, los postulantes a la Cámara alta Eduardo Romagnoli (UNA), Carlos Reutemann (Cambiemos) y Omar Perotti (FpV) se someterán a entrevistas públicas.
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