Rodrigo Arévalo
Diputados del kirchnerismo y la izquierda pidieron al gobierno una sesión especial para que el Congreso de la Nación debata el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Entre sus propuestas incluyen una consulta popular vinculante para que sea la población la que decida.
“Tiene que pasar por el Congreso porque no es un crédito normal. Es un empréstito que tiene determinada cantidad de condiciones que el FMI impone al conjunto de los argentinos. No sólo está en juego el monto, el plazo y la tasa de interés”, dijo el presidente del bloque Frente para la Victoria-PJ, Agustín Rossi, a El Ciudadano.
El préstamo en stand by de 50.000 millones de dólares del organismo financiero impone condiciones a la Argentina, entre ellas el uso del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Ansés para pagar jubilaciones presentes.
“El Fondo de Garantía de Sustentabilidad es un flujo que genera rentabilidad e intereses. Si rematan las acciones, como pide el FMI, se ponen en juego las jubilaciones futuras”, indicó el legislador santafesino.
Cuando asumió el gobierno de Mauricio Macri, el Fondo de garantía de Sustentabilidad tenía 65.000 millones de dólares. Según reveló el periodista Ari Lijalad en El Destape, ese dinero está siendo usado para participar en fondos de inversión que a su vez invierten en empresas de Nicolás Caputo y Marcelo Mindlin, empresarios que mantienen una estrecha relación con el presidente. Así, el capital de ese fondo bajó a 61.000 millones.
Según las actas publicadas en el sitio web que dirige Roberto Navarro, se dan tres tipos de maniobras: la inversión en Fondos que compran Lebacs (algo que Ansés podría hacer en forma directa y se ahorraría la comisión), la inversión en fondos donde Ansés representa casi todo el capital (por lo que se trata de un instrumento a medida para usar dinero de los jubilados por fuera de los controles) y la colocación de dinero de Ansés en fondos que luego invierten en empresas de Caputo y Mindlin.
El pedido de sesión especial es para este martes a las 11 y no cuenta con las firmas del Frente Renovador y el Bloque Justicialista. Este último consideró que el Ejecutivo tiene facultades exclusivas para celebrar acuerdos referidos al endeudamiento.
Además de Rossi firmaron Alejandra Rodenas, Alejandro Ramos, Cristina Álvarez Rodríguez, Máximo Kirchner, Fernando Espinoza, Fernanda Vallejos, José Luis Gioja, Juan Manuel Pereya, Mayra Mendoza, Leonardo Grosso, Adrian Grana, Luana Volnovich (todos del kirchnerismo), Nicolás Del Caño y Romina Del Pla (del Frente de Izquierda y de los Trabajadores).
“Un hombre de los bancos”
Macri sorprendió la semana pasada al designar a Luis Caputo al frente del Banco Central. El ex ministro de Finanzas fue el encargado de la toma de deuda durante todo el gobierno de Macri y fue uno de los funcionarios más cuestionados por poseer cuentas off shore en paraísos fiscales.
Rossi consideró que Caputo “es un hombre de los bancos” y “todo lo que haga” al frente del Central será “para que la banca privada gane más plata”.
“Poner al frente del Central, que tiene que cuidar las reservas, a alguien que siempre estuvo del otro lado, no parece ser la decisión más inteligente”, señaló el Chivo. Y agregó: “No creemos que el cambio de nombres modifique el rumbo económico. El problema es el programa que ejecutan, no quienes son los que lo ejecutan”.
Por último, el diputado consideró que las medidas impuestas por el FMI a cambio del crédito “van a generar una profunda recesión económica”. “Terminaremos el año con una alta inflación y cero crecimiento”, lanzó Rossi.
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