María Elena no quiere dinero. Tampoco una condena rápida. Lo único que busca desde el 4 de enero de 2015 es que se esclarezca el crimen de su hijo, Jonatan Herrera, asesinado en la puerta de su casa de Tablada por efectivos de la Policía de Acción Táctica (TAC). Hoy será un día clave en la causa, que tienen a cuatro uniformados detenidos, ya que el juez Gonzalo López Quintana dará a conocer su resolución sobre dos temas clave que pidió la Fiscalía. Uno es la prórroga de la prisión preventiva de tres de los acusados y el otro, la unificación de las querellas (que tiene a la mamá de Jonatan por un lado y a la ex pareja del joven, en representación de su hijo pequeño, por el otro). En paralelo con la audiencia, prevista a las 13, la Multisectorial Justicia por Jonatan convocó a una concentración en la puerta de Tribunales para exigir Justicia y el rechazo a la unificación de las querellas.
El reclamo de los familiares de Jonatan es intensificaron a fines del año pasado, con fuerte rumores de la firma de un acuerdo abreviado entre el fiscal Adrián Spelta y tres de los cuatro policías implicados. El acuerdo, que generó cortocircuitos entre las partes querellantes, pretendía acusar a tres uniformados por abuso de armas con penas de tres años de cárcel. María Elena salió a reclamar que todos los responsables de la muerte de su hijo sean juzgados en un juicio oral y público, dado que sólo uno de los policías había sido imputado de homicidio.
“Intentar sacarme de la querella es algo inédito. En cuanto al fiscal, tendría que haber rescatado pruebas y seguir estudiando todo lo que pasó ese día, en vez de estar preocupado de si yo estoy o no en la causa. Sabés por qué. Porque María Elena Herrera grita a los cuatro vientos Justicia. Y quiero saber quién mató a mi hijo. Porque lo que hicieron ellos no tiene perdón, no tiene nombre. Yo sigo luchando. Y ojalá que el señor juez se acuerde de toda mi lucha y que también se acuerde que tuvo una madre. Y que esa madre también hubiese estado luchando por él como yo lo estoy haciendo ahora por mi hijo”, dijo ayer María Elena a El Ciudadano al tiempo que invitó a acompañar su lucha en la puerta de Tribunales.
La causa
En diciembre pasado el fiscal Spelta había acusado por el delito de homicidio calificado a Ramiro R., para quien solicitó una pena de prisión perpetua, basado en peritajes de que fue el autor de uno de los dos disparos mortales que recibió Herrera en la zona hipogástrica. El otro tiro que le pudo causar la muerte fue en el cráneo y no pudo determinarse quién disparó, aunque dos de los otros tres policías acusados estaban en la línea de tiro.
Sobre estos tres policías, Alejandro G., Francisco R., y Luis S., existió una negociación entre la defensa a cargo de Sara Marcos y la Fiscalía para arribar a un abreviado aunque el convenio finalmente no se concretó para dos de ellos (Francisco R. y Luis S.), quienes el viernes pasado fueron acusados por tentativa de homicidio calificado, por lo cual el fiscal solicitó una pena de 12 años de cárcel. La nueva acusación se conoció el viernes pasado, en la misma audiencia en la que el fiscal requirió la unificación de las querellas.
Jonatan fue asesinado en la puerta de su casa de barrio Tablada el primer domingo de enero de 2015 un solitario ladrón que era perseguido por efectivos del Comando Radioeléctrico pasó corriendo a su lado mientras lavaba el auto en la vereda. En esos momentos, un grupo de efectivos de las PAT que viajaban en colectivo, descendieron y abrieron una demencial balacera que terminó con la vida de Joni, que recibió dos disparos.
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