Negui Delbianco
Dos hermanos oriundos de la provincia de Corrientes, uno de ellos policía, fueron detenidos en la mañana de ayer por personal de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones en la terminal de ómnibus Mariano Moreno, minutos después de llegar a la ciudad con alrededor de 20 kilos de marihuana en uno de sus bolsos. Voceros del caso indicaron que el hallazgo se produjo gracias al olfato de perros que personal de la Unidad Regional II tiene para realizar operativos en la vía pública.
El operativo se realizó en la mañana de ayer, cuando integrantes de la sección inteligencia zona sur de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones se encontraban recorriendo la terminal de ómnibus junto a agentes de la Unidad Regional II, quienes llevaban “canes detectores” pertenecientes a la Policía rosarina.
Desde hace algunas semanas, personal de la ex Digedrop realiza tareas de prevención activa en distintos lugares de la provincia en los que el tránsito de personas es fluido. “Uno de ellos se hace en la zona de la terminal de colectivos de Rosario, con el fin de prevenir el ingreso, distribución y comercialización de sustancias prohibidas”, confiaron voceros del caso.
Cerca de las 9 de ayer, a la salida de una de las puertas de la estación terminal, vieron a dos personas que salían del lugar con dos bolsos en actitud sospechosa. “Los perros se pusieron en actitud de sospecha y debimos detener a estos dos hombres y revisamos sus pertenencias”, confió el subcomisario Fernando Romitti, a cargo del operativo.
Ante esto, los uniformados se acercaron al par de hombres para pedirles documentos. Luego de pedir la presencia de testigos, los agentes trasladaron a los recién llegados al interior de la estación, donde comenzaron a requisar las pertenencias de ambos.
Los detectives encontraron ocultos debajo de varias prendas de vestir, 11 panes de marihuana en cada uno de los bolsos, por un total de 19,950 kilos de cannabis sativa, cuyo valor fue estimado en 30 mil pesos, cifra que cuanto menos “se triplica al ser comercializada mediante vendedores barriales o deliverys”, relataron las fuentes.
El mayor de los detenidos, de 30 años, resultó ser un sargento de policía de la Patrulla Rural de Goya, provincia de Corrientes, quien en ningún momento ocultó este dato, incluso mostró a los pesquisas su credencial de policía, y luego entregó su arma reglamentaria marca Browning calibre 9 milímetros con su cargador con nueve proyectiles.
El otro arrestado es su hermano de 29 años, quien reside en la ciudad correntina de Itatí, ubicada unos 280 kilómetros al norte de Goya, a quien –además de la droga– le incautaron dos teléfonos celulares y una importante cantidad de dinero en efectivo.
El caso es investigado por el Juzgado Federal Nº 4, a cargo de Marcelo Bailaque, junto con la colaboración de la sección Inteligencia de la Dirección Provincial de Control y Prevención de Adicciones (ex Digedrop) y personal de la Unidad Regional II.
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