Poca suerte está teniendo Nadia Podoroska en sus primeras experiencias en torneos de WTA. Por la primera ronda del torneo de Florianópolis, la rosarina tras atravesar la clasificación tuvo un debut sumamente complicado ante la húngara Timea Babos, número 44 del mundo, que la terminó venciendo por 6-7, 6-3 y 6-2 en dos horas de juego.
Hace unas semanas, en el WTA de Rumania (donde participó de su primer main draw) cayó en el debut sin poder hacer demasiado (6-1 y 6-0) ante la montenegrina Danka Kovinic, 54ª del mundo.
Hoy nuevamente una jugadora con más experiencia y en el lote de las cincuenta mejores del mundo estuvo enfrente. Y si bien volvió a ser derrota, en esta ocasión el choque resultó mucho más equilibrado al punto tal de haberse quedado con el primer set por 7-3 en el tie break.
En el segundo parcial, la europea impuso su mayor experiencia para quedarse con el servicio de Podoroska en el quinto, séptimo y noveno game. Pese a lograr quebrar en el octavo juego, la rosarina cedió el parcial por 6-3.
En el set final, nuevamente prevaleció Babos al hacerse con el servicio de la pupila de Carlos Rampello en el cuarto y octavo game.
Más allá de la derrota, Nadia Podoroska (237 del mundo) sigue dando pasos adelante en su carrera y hoy durante un rato largo de partido le jugó de igual a igual y hasta superó por momentos a una rival que tiene un título WTA y supo ser finalista en dobles en Wimbledon 2014 y 2016 y en dobles mixtos en 2015.
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