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Villa Gobernador Gálvez

Denuncian a policías por arresto irregular

Mantuvieron a niños de 2, 9 y 12 años apresados sin alimento ni abrigo.


El defensor regional de Rosario, Gustavo Franceschetti, junto a la defensora pública adjunta María Eugenia Carbone, presentó una denuncia penal ante el Ministerio Público de la Acusación (MPA) contra efectivos policiales del Comando Radioeléctrico, junto con personal de la comisaría 25ª, de la localidad de Villa Gobernador Gálvez a raíz de la detención ilegal de Roberto M. y de sus tres hijos, menores de edad, además de su nieta de dos años. La detención tuvo lugar el 30 de mayo pasado.

Según expresan desde la Defensoría, alrededor de las 05.30 de la mañana, Roberto M. se encontraba en su casa, ubicada en Maipú y La Ribera de Villa Gobernador Gálvez.

Personal policial del Comando Radioeléctrico y de la comisaría 25ª acudió al lugar a raíz de una denuncia efectuada por la hija de Roberto M., quien lo acusaba de haber prendido fuego su hogar.

Los efectivos ingresaron al domicilio de Roberto M. sin orden judicial, forzaron el candado del portón de acceso al patio de la vivienda y entraron a la casa, junto con la hija del denunciado, su pareja y la hermana de este último, según la denuncia.

Luego, los policías arrestaron a Roberto M. por la presunata comisión del delito de incendio doloso, y amenazas coactivas. Fue trasladado junto con su nieta de dos años y dos de sus hijos menores de edad a la comisaría 25ª de Villa Gobernador Gálvez. A su vez, también fue detenido otro hijo de M., también menor, señalado como partícipe en el incendio de la vivienda mencionada.

Luego de ello, personal policial nuevamente revisó, sin orden judicial, el domicilio de Roberto M. en busca de armas de fuego, no hallando en la finca elemento de peligrosidad alguno, dijeron las fuentes. Inmediatamente luego de ocurrida la detención, se acercaron a la comisaría 25ª el hermano y la ex esposa de Roberto M., a los fines de que les fueran entregados los menores. Sin embargo, los efectivos de la seccional hicieron caso omiso a dichos requerimientos, a pesar de que se les mostró documentación que acreditaba la tenencia de la beba, añadieron los voceros.

Los pequeños permanecieron en el destacamento policial desde la hora de la aprehensión, hasta las 19, aproximadamente, cuando el personal policial les permitió que fueran retirados por el hermano y la ex esposa de M. Durante el tiempo en que estuvieron demorados, los menores estuvieron mal vestidos y no les suministraron ningún tipo de alimento. Uno de ellos, de nueve años, sólo estaba vestido con pantalón corto, remera y una campera. El otro, de doce, vestía zapatillas, jeans y remera, sin campera. Ambos fueron interrogados por personal policial respecto de si conocían que su padre tuviera armas de fuego en la casa y si lo habían visto incendiar la vivienda de su hermana. Mientras tanto, el otro chico, de 14 años, fue ingresado en una celda común, junto con otros presos mayores edad, según reza la denuncia.

Por su parte, la beba deambulaba por la comisaría en zapatillas, buzo y pañales. Estaba sucia, dado que había defecado y orinado. Además, los policías no permitieron el ingreso de pañales para que puedan ser cambiados, se informó.

El 31 de mayo, se desarrolló la audiencia imputativa contra Roberto M. ante el juez Gustavo Pérez de Urrechu, quien ordenó la libertad del detenido, y dispuso “que el MPA investigue el accionar del personal actuante, así como a las víctimas del presente hecho ante la probable incursión del delito de incumplimiento de orden judicial”.

“Por ello mismo, y ante las circunstancias del caso, esta defensa pública ha formulado la pertinente denuncia, ofreciendo como pruebas declaraciones testimoniales de los familiares de M., testigos de los hechos padecidos, y la planilla de tortura, donde el acusado detalla los sucesos ocurridos”, sostuvieron desde el Servicio Público de la Defensa provincial.

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