Un informe del diario La Tercera mostró la enorme preocupación que ha despertado en la mayoría de los futbolistas extranjeros el devastador terremoto y sus fuertes réplicas que ha sufrido Chile.
Al menos dos jugadores de primera división y siete de Primera B (segunda división) fueron invadidos por el miedo y dijeron adiós a sus respectivos clubes, entre ellos el argentino Claudio Husaín, uno de los valores más destacados del Audax Italiano.
“Se juntaron muchas cosas. Aspectos familiares y sin duda que lo del terremoto incidió fuerte para tomar la decisión de irme”, declaró Husaín, ex volante de Newell’s y de la selección argentina.
Otro con ganas de irse tras el terremoto es el colombiano del Colo Colo MacNelly Torres. Una foto de éste abre el suplemento deportivo de El Mercurio con el título: “Apenas aguanta”.
Torres ya había manifestado interés por partir de Chile, recordó el diario, y los temblores de los últimos días acentuaron su deseo de abandonar el país y acelerar el trámite con los dirigentes del Cacique. A la espera de resolver formalmente su situación, envió a su familia a Medellín.
La mayoría de los extranjeros, eso sí, prefirió quedarse. Aunque varios en condiciones de vida distintas. Los de Everton y Wanderers, por ejemplo, dejarán sus departamentos para habitar en casas (ojalá de un piso). Lo mismo sucede en Ñublense.
“Nadie renunció, pero todos van a cambiarse. Mientras no se arregle esto, sus familias siguen fuera del país”, explica el directivo chillanejo Juan Ramírez.
En la “B” hubo más miedo
La estampida de internacionales fue mucho más dura en los equipos de Primera B. Curicó perdió a dos figuras, los paraguayos Braulio Armoa y Wilson Méndez; Rangers, también a tres paraguayos: José Pedrozo, Roberto Moreira y Marcelo Rolón; Naval, a los argentinos Jorge Detona y Andrés Navarro; Concepción, a los transandinos Matías Sepúlveda y Andrés Colombo.
Comentarios