El Ciudadano
Un carrero de 33 años y su acompañante de 28 frenaron en la esquina de 5 de Agosto y España para hablar con un vecino. Eran las 22 del miércoles, en una jornada muy calurosa. Los tres hombres que charlaban no vieron venir la moto con dos ocupantes que se les acercó desde el oeste. Al menos una decena de disparos retumbó en el corazón de Las Flores. Fue la última noche de Juan Carlos “Juanca” Fernández, un vecino de 33 años, quien en el último tiempo tenía varias broncas abiertas y había sido blanco de reiteradas amenazas. Cinco tiros en el cuerpo y uno en la cabeza acabaron con su vida luego de dos horas de agonía que se dividieron entre el quirófano del Hospital Roque Sáenz Peña y la sala de cuidados intensivos del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca). Su compañero, Jorge A., cinco años menor, la sacó barata: fue herido por dos disparos en pierna y brazo que no representaron riesgo aunque lo dejaron en observación.
“Fueron los sobrinos de Ariel Cantero, quien nos tenían amenazados. A ellos no les podés decir nada porque te mandan a matar, a amenazar, te sacan la casa. Hace un mes Pope y Willy Corbera le dispararon en la espalda a Juan Carlos”, dijo la hermana de la víctima fatal al móvil de Somos Rosario, acaso eligiendo la exposición como una forma de resguardo. La mujer adelantó que se encadenará a Tribunales para pedir protección y justicia.
Según contaron vecinos de Las Flores, al carrero Juanca Fernández se la tenían jurada. El domingo y el lunes pasado había zafado de dos ataques en esa misma zona. Un mes atrás le habían pegado un tiro en la espalda. Su muerte, contó su hermana, se enmarca en una trama de broncas barriales con la familia Cantero (fundadores de la banda Los Monos), las que pueden incluir disputas por el robo de caballos, por la venta de drogas o venganzas del tipo dolor por dolor.
“Hace cuatro o cinco días se nos retiró la custodia que nos pusieron cuando se armó el quilombo de Chabela Cantero, del cual nosotros no tenemos nada que ver”, expuso la familiar del asesinado. El problema al que hizo referencia la mujer fue el asesinato de Isabel Petrona “Chabela” Cantero, 56 años, hermana de Ariel “El Viejo” Cantero, fundador de los Monos y padre del heredero de la organización Claudio “Pájaro” (asesinado en mayo 2013), Ramón “Monchi” Machuca y Ariel “Guille” Cantero, este último condenado en la justicia provincial y federal por asociación ilícita, homicidios y tráfico de drogas.
A la Chabela la mataron el 16 de julio de 2017 en España al 7000, en el marco de una discusión con una vecina, María de los Ángeles “Pato” Schneider, y su esposo, Sergio David Díaz, alias Nango.
Pato está prófuga en esa causa. Varios de sus allegados, en cambio, perecieron bajo el plomo de la venganza por el asesinato de Chabela, que era una histórica militante social de Las Flores y organizadora de la cooperativa de carreros del barrio. Sergio David “Nango” Díaz fue asesinado a principios de enero de 2018, al igual su hermano Gustavo, y dos familiares de Pato, Juan Carlos y José Luis, también acribillados sin piedad en el lapso de un año. Ahora los investigadores cotejan datos para establecer si el asesinato de Juanca Fernández integra esa lista.
Los investigadores mencionaron que Juan tenía antecedentes desde 2007. Estuvo sindicado por la Justicia por delitos van desde homicidio, lesiones, encubrimiento y desobediencia judicial y amenazas, estos últimos registrados en diciembre de 2018, según difundió el Ministerio de Seguridad, aunque no se conoció si terminó condenado algunos de estos delitos.
El ataque
Voceros judiciales y policiales reconstruyeron que este miércoles a las 22, Juanca volvía a Las Flores tras una jornada de cirujeo. Dos jóvenes en una moto Honda Titan SG color azul lo acribillaron por la espalda mientras estaba en su carro junto a Jorge A., a metros del predio deportivo del Club Amistad. Un patrullero lo cargó a los pocos minutos camino al Roque Sáenz Peña y luego fue derivado al Heca, pero no logró sobrevivir. Los verdugos “huyeron por la avenida del playón hacia el este”, dijeron desde el barrio.
Un vecino mencionó a un joven con una capucha color gris como quién detonó los disparos, sin dar nombre. La hermana de Juanca venció el miedo y dijo que su familia tenía problemas con “Pope, el Denis, Willy Corbera y Mono. Son sobrinos de Ariel Cantero y se creen los dueños del barrio”, sostuvo la mujer en una entrevista televisiva.
La mujer cerró su acto de arrojo con un anuncio desesperado: “Ahora me voy a encadenar en Tribunales hasta que no tenga justicia por mi hermano. Mis hijos no pueden salir, no pueden ir a la canchita, a la escuela. Ellos te mandan a robar los caballos. Te piden plata. Teníamos custodia por estar amenazados de muerte y ahora pasó esto”.
La investigación del asesinato de Juanca quedó en manos de la fiscal de Homicidios Dolosos en turno Georgina Pairola. Fuentes policiales y el Ministerio Público de la Acusación no mencionaron el contexto de amenazas como tampoco el motivo del retiro de la custodia descripta por la hermana de la víctima. “Hay medidas en curso para dilucidar el móvil del hecho”, indicaron en un comunicado de prensa.
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