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venganza con sello monos

Los ecos del crimen de Chabela Cantero

Tres hijos de mujer, asesinada el 16 de junio pasado en barrio Las Flores, fueron detenidos y acusados del incendio de la vivienda de una sospechosa del crimen de su madre y por amenazas. Ayer obtuvieron la prisión domiciliaria.


El asesinato de Isabel “Chabela” Cantero, hermana de Ariel Cantero y referente de barrio Flores, trajo una serie de encontronazos con la familia de la sindicada autora de los disparos. Ese viernes 16 de junio, una nieta de 16 años de la víctima fatal terminó con un proyectil en el cráneo mientras que la hija de Chabela también sufrió graves heridas en la cabeza cuando fueron emboscadas en España al 7100. Tras el crimen, la vivienda de la esquina de España al 7100 fue incendiada y saqueada. La dueña, alias Pato, y su pareja Nango fueron señaladas como los protagonistas de los disparos, los uniformados los demoraron y luego recuperaron la libertad. Los pesquisas determinaron que los testigos sindicaban a Pato, como también llaman a la madre de esta joven, quien se mantiene prófuga de la Justicia, según contaron fuentes relacionadas a la investigación. El 17 de julio, la Fiscalía ordenó allanamientos donde quedaron detenidos tres hijos de Chabela acusados del incendio y amenazas en la audiencia y se les dictó 30 días de prisión preventiva. Ayer, al vencerse el plazo, se realizó una audiencia donde el juez les dictó la prisión domiciliaria al aceptar la propuesta de la defensa de que los acusados se muden del barrio. Desde el ataque a la familia Cantero, un hermano de Nango fue asesinado y un familiar de las Pato fue ejecutado de un tiro en la nuca.

Ayer a las 11 ante el fiscal Fernando Dalmau y el juez Héctor Núñez Cartelle, Juan Ubiedo, abogado defensor de Ángel M., de 33 años; Denis M., de 28, y Hugo C. pidió la morigeración de la prisión preventiva hasta la audiencia preliminar al juicio.

Los imputados aseguraron ante el juez que no tienen intención de entorpecer la investigación del crimen de su madre como tampoco incurrir en delitos contra la familia de la sospechosa. Para demostrarlo, dos ofrecieron mudarse a otra ciudad y uno de ellos irá a otro barrio.

El fiscal Dalmau, en reemplazo de su par Fernando Rodrigo –por estar denunciado por intervenir de forma ilegal el teléfono de su ex novia– se opuso a la prisión domiciliaria y pidió la extensión. Sin embargo, el investigador sugirió que si se da el arresto en los domicilios propuestos se realicen inspecciones periódicas y sorpresivas y si se dan las circunstancias los detenidos lleven tobillera.

El magistrado aceptó el pedido de la defensa como también las sugerencias del fiscal en cuanto al control y el uso de la tobillera para los imputados por daño, incendio, amenazas y violación de domicilio.

Colaterales

Cinco días antes del arrestro del trío en barrio Las Flores, Gustavo Díaz, de 40 años, fue asesinado de un balazo en el tórax cuando un desconocido se asomó por una de las ventanas de su casa y abrió fuego en Uriburu al 300 bis. Las detonaciones también dejaron a su hijo de 10 con un impacto en el glúteo.

De acuerdo con la investigación, hacía minutos que David Díaz –conocido como Nango y a quien le quemaron su casa de España al 7100 tras el crimen de Chabela– se había ido de la casa de su hermano. Según contó la viuda, Nango buscó refugio cuando lo señalaron como uno de los autores del crimen. La Justicia no lo entendió de esa manera y lo dejó en libertad, aunque continuó bajo investigación al igual que Pato hija, María de los Ángeles.

Los allanamientos del 17 de julio donde los tres hermanos quedaron detenidos están relacionados con una investigación que recayó en la Unidad de Investigación y Juicio debido a que el crimen de Chabela —investigado por Georgina Pairola– desató una serie de encontronazos en las cuadras de Flor de Lirio y España. La mayoría de los operativos fueron en Lirio y Estrella Federal. Los más de 150 uniformados buscaron en las viviendas de la familia de Chabela debido a que los testigos del ataque a balazos, que también dejó a la nieta de la mujer ciega de un ojo luego de una bala le impactara en el pómulo, sindicaron a Pato (madre) como la que apretó el gatillo, lo que provocó promesas de venganza en el barrio. De los procedimientos secuestraron celulares, vestimentas pero no armas.

El clima de tensión en la zona sur pareció calmarse hasta la noche del sábado 22 de julio cuando José Luis Schneider, de 40 años, recibió un disparo en la nuca. Eran casi las 23 cuando el atacante se pudo detrás del hombre y abrió fuego en la esquina de Guaria Morada y Petunia. La víctima agonizó quince días hasta el domingo 6 de agosto, cuando los médicos del Heca anunciaron que había fallecido. El fiscal Adrián Spelta no descartó que el móvil esté relacionado con el asesinato de Chabela debido a que la víctima fatal es allegada a la familia que señalaron en el barrio como la que abrió fuego.