Dos jóvenes fueron condenados por la tentativa de homicidio contra un militante de Cuba- MTR. El hecho se produjo en marzo de 2015, poco después del crimen de Javier Barquilla, otro integrante del movimiento, quien se enfrentó a una banda que asolaba Villa Banana para defender a su cuñado. La parte dispositiva de la sentencia se conoció ayer cuando el juez Juan Andrés Donnola, que presidió el tribunal unipersonal durante el juicio oral, condenó a Jonatan Alberto Sosa y Franco Sebastián Alegre a las penas de 7 y 5 años y 4 meses de prisión respectivamente. Los fundamentos fueron diferidos por el plazo de ley.
La noche del 6 de marzo de 2015 Sergio David M. recibió un impacto de bala en el cuello cuando se encontraba en una canchita de fútbol ubicada en 27 de Febrero y Pascual Rosas, en Villa Banana. Según la acusación fiscal, los agresores mantuvieron una discusión con la víctima horas previas, en la cual lo amenazaron de muerte. Luego volvieron a su casa pero no hallaron a Sergio M., por lo que decidieron buscarlo. Lo encontraron en el potrero y le dispararon. El proyectil le ingresó por el cuello y le afectó los pulmones, el hígado y arterias y quedó alojado en su cuerpo. Fue trasladado en un auto particular hasta el Hospital Clemente Álvarez, donde debió ser operado. Permaneció dos semanas en terapia intensiva y logró sobrevivir.
Doce días después los agresores, hermanos entre sí, fueron detenidos a raíz de llamados telefónicos que brindaron su ubicación. Uno de ellos se movilizaba con muletas a raíz de una herida de bala en la pierna, mientras que el otro tenía un ano contranatura luego de recibir 4 balazos en el cuerpo.
Según la organización que nuclear a la víctima, estas personas eran eslabones menores de una banda que dirigía Pandu, un hombre detenido por el homicidio de Javier Barquilla, ocurrido un mes antes del ataque a Sergio M., lo que había tensado la situación en el barrio que sufría los escarnios del grupo.
Durante el juicio, en el que litigaron por la fiscalía Ademar Bianchini y por la defensa oficial Martín Riccardi y Lara Maenza, los imputados se desvincularon del hecho, aunque los testigos afirmaron que Noño y Sebi llegaron a la cancha acompañados de otras tres personas y dispararon contra la víctima.
Ayer, el juez Juan Andrés Donnola dio a conocer el veredicto. Hasta la sala llegaron con custodia los hermanos; uno de ellos no podía contener su nerviosismo y no dejaba de moverse en la silla. El magistrado leyó sólo la parte dispositiva del fallo y condenó a Jonatan Alberto Sosa, alias Ñoño, a la pena de 7 años de prisión por el delito de tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego en calidad de coautor.
Esta pena unifica una condena anterior en suspenso por dos hechos de robo que data de 2014 y pesaba sobre Ñoño. Mientras que Franco Sebastián Alegre fue condenado a 5 años y 4 meses por el ataque a Sergio M.
Otra golpiza
En mayo pasado Sergio M. fue detenido cuando filmaba un grupo de móviles que llegaron hasta Villa Banana. Aunque antes de trasladarlo a la comisaría 13° junto a su hermana, que intentó defenderlo, fueron golpeados. “Me pegaron en los testículos, me pegaron piñas, me patearon la espalda, me lastimaron la oreja. Estuve ahí desde las nueve de la mañana a las cuatro de la tarde”, aseguró la mañana que llegó a Fiscalía a realizar la denuncia.
Comentarios