El titular de la comisión de Producción y Empleo del Concejo, Martín Rosúa, junto al titular de la comisión de Seguridad, Diego Giuliano, y el edil Alejandro Roselló presentaron ayer oficialmente el proyecto para la creación de la Oficina Municipal Anticorrupción, un organismo “independiente” con potestad de recibir denuncias y realizar investigaciones sobre funcionarios y agentes municipales, y empresas privadas contratadas o vinculadas al Estado local. No es la primera vez que se presenta una iniciativa en esa dirección, pero el rasgo común desde la recuperación democrática en 1983 es que ninguna salió del nivel de proyecto. Esta vez, al contar con la coautoría de uno de los miembros del interbloque que representa al oficialismo, de otro que es parte del más numeroso de los bloques de la oposición y de un tercero surge de una de las vertientes del justicialismo, la idea cuenta por vez primera con chances serias de avanzar.
Rosúa, del monobloque UCR 1983, Roselló de la bancada Unión PRO de cinco integrantes y Giuliano, del también monobloque Rosario Federal, posaron juntos tras la presentación del proyecto que, de arranque, cuenta con 8 votos asegurados –también firmó la propia presidenta del Concejo, Daniela León– entre los 28 ediles. Pero como hay varios antecedentes de proyectos análogos se remiten a otras fracciones de la UCR, al Partido del Progreso Social, al ARI-Coalición Cívica y hasta el de Ética Pública de la debutante bancada de Ciudad Futura, que por vez primera tiene presencia en el cuerpo legislativo, la chance se sumar más voluntades tiene claro viento a favor, si es que se resuelven las distancias entre rasgos de las distintas iniciativas que se fueron presentando. La cuestión, de igual modo, no es fácil.
Según el terceto de ediles, su iniciativa entrará en debate la semana próxima en el Palacio Vasallo. La idea es que el organismo sea conducido por la primera minoría del Concejo, tomando en cuenta las últimas elecciones de carácter Ejecutivo. Ello redundaría en un crecimiento en posiciones decisorias del PRO. ¿Puede ser una traba en la negociación? El macrismo local ocupa desde diciembre del año pasado la titularidad de la Oficina Municipal del Consumidor y acaba de formalizarse en la vicepresidencia del Ente de la Movilidad, ambos puestos correspondientes al Legislativo.
Por lo pronto, habrá que ver la disposición de los autores y de los demás bloques para ceder o plantarse respecto de los mecanismos y del cuerpo de la iniciativa misma.
“Es importante destacar el consenso de los bloques que nos acompañaron y nuestra intención de que nos apoyen todos los sectores políticos en la creación de esta Oficina, que fortalecerá la gestión municipal a través de un control independiente que traerá beneficios no sólo a quienes gobiernan sino a la ciudadanía”, sostuvo en ese marco Rosúa.
“La creación de una Oficina Anticorrupción tiene que verse como una respuesta concreta al reclamo de transparencia que demanda la sociedad. Mediante este proyecto nos propusimos superar cualquier tipo de barrera político partidaria y trabajar en conjunto para generar un órgano de control que signifique una mejora en la calidad institucional de la ciudad”, explicó por su parte Roselló.
“No estamos hablando de alianzas electorales sino de coincidencias estratégicas para mejorar la calidad institucional del municipio, permitiendo la participación de los vecinos en los controles”, indicó por su parte Giuliano.
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