País

Economía Social

Con las mujeres como protagonistas se consolida el Turismo Rural

La Red de Turismo Rural Centro Sur de Buenos Aires integra nueve proyectos asociativos que involucran a unas 90 familias. En el 60 por ciento de los casos, son ellas quienes llevan adelante la unidad de negocios de los emprendimientos.


Cristina Aizpeolea (*)

La Red de Turismo Rural Centro Sur de Buenos Aires integra nueve proyectos asociativos que involucran a unas 90 familias. En el 60 por ciento de los casos, son ellas quienes llevan adelante la unidad de negocios de los emprendimientos.

En efecto, “Es real y conocido que entre quienes dirigen emprendimientos turísticos existe un alto porcentaje de mujeres; en el espacio rural, esa realidad está muy presente”, dice la licenciada en Turismo por la Universidad Nacional del Sur (UNS) Julieta Colonnella, con el aval que le dan 20 años de experiencia en la Agencia de Extensión del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) con sede en la ciudad bonaerense de Coronel Suárez.

Tal como contó a Red Mayo, Colonnella coordina junto a un equipo técnico de seis profesionales la Red de Turismo Rural Centro Sur de Buenos Aires, integrada por nueve experiencias asociativas, cada una de ellas con 8 a 10 proyectos productivos de los alrededores de Tandil, Tornquist, Ventania, Pigüé, Cabildo, Dufaur, Carhué y Villarino.

Remontándose a los inicios, Colonnella recuerda que en el ámbito de gestión del Centro Regional Buenos Aires Sur (Cerbas) del Inta que abarca al 60 por ciento del territorio bonaerense, el primer grupo de productores agropecuarios y prestadores de servicios turísticos se formó en 2004 en el marco del Programa Cambio Rural.

Más tarde, a la luz de los resultados y del impacto positivo que tenían los emprendimientos, se fueron replicando en otras geografías de la región.

“Fueron los mismos protagonistas compartiendo su testimonio, quienes incentivaron la formación de nuevos grupos en localidades cercanas”, remarca la profesional.

Así se llegó en 2008 a la mencionada Red, integrada en actualidad por unas 90 familias, que se posicionó en un mercado en constante crecimiento con un abanico de propuestas que hacen tangible gran parte del entramado cultural de la provincia de Buenos Aires.

En cuanto al marco regulatorio, Colonnella precisa que la Red desarrolla su actividad según los principios de la Ley Nacional de Turismo Nº 25.997 y de la Ley Provincial de Turismo N° 14.209 que entienden al Turismo Rural como una herramienta fundamental para el desarrollo económico productivo local.

“Es un turismo armónico con la naturaleza, con la conservación y puesta en valor del patrimonio natural, cultural y económico de las comunidades, que favorece el arraigo y el asociativismo, y colabora con el fortalecimiento de las economías regionales y promueve el crecimiento del sector productivo, garantizando condiciones justas y equitativas de acceso a estos servicios”, resume Colonnella.

La oferta contempla desde alojamiento, gastronomía y actividades recreacionales, hasta agroalimentos, productos regionales y artesanías.

Hay alfarería, almacenes de ramos generales, cabalgatas, caminatas, criaderos de cerdos y de gallinas de raza, chocolatería artesanal, emprendimientos de permacultura, huertas, tambos, queserías, pulperías, viveros, plantaciones de aromáticas y olivícolas, o museos rurales.

Ellas, al frente

Luego de 15 años de trabajo sostenido, Colonnella no oculta “el orgullo de formar parte de un proyecto único en la región en donde se evidencian los aprendizajes del trabajo colaborativo y el beneficio que brinda a todos el hecho de no ir solos sino acompañados, convencidos de que las grandes transformaciones se logran cuando hay una visión compartida”.

En este marco, la coordinadora señala que la Red fue reconocida a nivel nacional y provincial por sus numerosas acciones, y destaca entre los logros más importantes la inclusión de los jóvenes y de las mujeres en el desarrollo territorial.

Según precisa, en el 60 por ciento de los casos son las mujeres quienes llevan adelante la unidad de negocios de Turismo Rural dentro de sus emprendimientos.

Son ellas las primeras en anotarse en cursos y capacitaciones, y las que motorizan las ferias y los encuentros regionales de intercambio de experiencias, al punto de ir modificando el mero apoyo a las iniciativas para tomar un rol preponderante y diferenciado en la prestación de los servicios.

“En muchos casos, la flexibilidad y la multiplicidad de tareas posicionan a la mujer como gerenciadora de un emprendimiento turístico, y le otorgan un lugar de privilegio que favorece la equidad con los hombres en la división de tareas y toma de decisiones. Lo mismo ocurre al observar casos concretos de incorporación de hijas e hijos a la mano de obra familiar dentro del sector turístico, cuando antes no encontraban un rol para desempeñarse, favoreciendo con esto el arraigo al territorio”, remarca.

¿Pero quiénes son las mujeres protagonistas del Turismo Rural? ¿Cómo se incorporaron en este proceso, desde qué experiencias personales y profesionales?

Profundizar en la perspectiva de género de esta fecunda actividad es para Julieta Colonnella un desafío apasionante. De la observación durante dos décadas de trabajo, infiere distintas realidades que compartió con Redacción Mayo.

“En principio, son mujeres profesionales o que se desempeñaban como ama de casa, con un capital cultural y económico, muchas de las cuales son neorrurales, que se inician en la actividad turística motivadas tanto por el anhelo de desarrollo personal como el de generar ingresos”, señala.

En ese contexto, la profesional del Inta enumera cuatro situaciones que encontró frecuentemente en el trabajo de campo:

  • Mujeres con una profesión de base que mantienen y, a manera de diversificación o de complemento, dirigen sus emprendimientos de Turismo Rural (TR).
  • Mujeres jubiladas de su profesión de base que continúan laboralmente activas, para quienes el TR sustituyó un empleo pasado por otro actual.
  • Mujeres residentes en destinos turísticos consolidados donde el flujo es sostenido y la actividad turística le representa su único desempeño actual e ingreso.
  • Mujeres que siempre acompañaron la labor de la unidad de producción agropecuaria sin definirse como productoras del agro y que, a raíz de la incorporación del TR, ven legitimada y formalizada su labor en la empresa, identificándose como prestadoras de servicios.

En esta descripción, menciona, probablemente, la más edificante y estimulante situación, que es la vinculada al arraigo, a la pertenencia y a la sucesión del establecimiento “y se da cuando, a través de la actividad turística, las hijas mujeres encuentran su rol en la empresa familiar agropecuaria”.

Red de Turismo Rural centro sur Provincia Buenos Aires

La Red está integrada por las experiencias asociativas de Turismo Rural Tandil; Pueblos y Sabores de Tandil; Turismo Rural Carhué, Turismo Rural Cortaderas, Sierras y Pampa Turismo Rural, Raíces de Campo, Turismo Rural Tornquist, Tradiciones Mediterráneas y Aguas Turísticas de Villarino.

Coordinan las técnicas Julieta Colonnella en su rol de Agente de Proyecto como nexo entre el Programa y los grupos, y Marina Monje, Susana Schwerdt, María Isabel Haag, Adriana Rossetti y María Elena Valdez, quienes se desempeñan como Promotoras Asesoras de las experiencias asociativas.

(*) Red Mayo/Cosecor

Comentarios