El Mundial Brasil 2014, definido por la presidenta Dilma Rousseff como la “Copa de las Copas”, comenzará hoy con la participación de ocho campeones y tres astros sobresalientes, en un marco que combina polémica en torno a la organización y épica por los antecedentes históricos.
Brasil-Croacia será el partido inaugural desde las 17 en el Arena Corinthians de San Pablo, uno de los escenarios más controvertidos dentro de un plan de inversión que disparó múltiples protestas sociales desde la Copa de las Confederaciones, el año pasado.
El seleccionado anfitrión, campeón en 1958, 1962, 1970, 1994 y 2002, asumirá el desafío de cerrar la herida abierta por el Maracanazo de 1950 cuando Uruguay, consagrado ese año y antes en 1930, le ganó la final 2-1 en Río de Janeiro.
A 64 años de esa gesta, Brasil todavía se retuerce dolorido por la peor humillación de su historia, por lo que buscará clausurar ese mal recuerdo con un equipo que tiene a Neymar (22) como estandarte.
El éxito de los pentacampeones acaso sea el mejor antídoto para adormecer el malestar social por los 15 mil millones de dólares invertidos y los ochos operarios muertos durante la organización, que demandó un gasto tres veces superior a lo presupuestado para la construcción y remodelación de los 12 estadios sede.
Ante ese contexto, el gobierno de Brasil dispuso el operativo de seguridad más grande en la historia de la competencia, compuesto por 170 mil agentes y un costo estimado de 870 millones de dólares.
Argentina, esperanzado en el talento de Lionel Messi, asume el papel de máximo rival brasileño en la pelea por un título que se le niega desde 1986 (también lo atrapó en 1978), cuando lo conquistó bajo la capitanía de Diego Maradona.
El rosarino, máxima figura del torneo, ganador cuatro veces consecutivas del Balón de Oro Fifa (2010, 2011, 2012 y 2013), jugará su tercer Mundial seguido con el deseo de superar los cuartos de final, algo que no logró en Alemania 2006 y Sudáfrica 2010.
Para el astro de Barcelona, el Mundial es una cuenta pendiente, pues del último se marchó sin marcar goles en los cinco partidos disputados.
El portugués Cristiano Ronaldo, que le robó el premio al mejor jugador del mundo este año, aspira a eclipsar al argentino con la selección lusitana, que podría toparse en cuartos de final con el equipo de Alejandro Sabella.
El tetracampeón Italia (1934, 1938, 1982 y 2002) jugará con exigencia máxima desde el inicio, al quedar mezclado en la primera fase en el “Grupo de la Muerte”, el D, junto a Uruguay e Inglaterra, vencedor en 1966.
Alemania, tres veces campeón (1954, 1974 y 1990), llega a Brasil con ilusiones de abrochar el cuarto título que merodea desde su última celebración, pues fue finalista en 2002 y tercero en las dos Copas siguientes.
Finalmente, España saldrá a defender la corona y a demostrar si está vigente o no la generación que encabezan Xavi Hernández y Andrés Iniesta; mientras que Francia –campeón en 1998– asumirá la obligación de dejar atrás su eliminación en la fase primaria de Sudáfrica 2010.
Brasil, la tierra más laureada del fútbol universal, cuna de genios futbolísticos, se abre al mundo para la vigésima edición del máximo torneo Fifa, la “Copa de las Copas”.
“Una sorpresa para todo el mundo”
La fiesta inaugural del Mundial, que se realizará hoy en el estadio Arena Corinthians de San Pablo, tendrá una duración de apenas 25 minutos, pero ofrecerá una gigantesco show y mucha emoción, en lo que será “una sorpresa para el mundo”.
Así lo calificó la coreógrafa belga Daphné Cornez, directora artística del espectáculo, que explicó en conferencia de prensa que se le rendirá “un homenaje a Brasil y a sus tesoros: la naturaleza, la danza y el fútbol”, en el marco acto inaugural que arrancará a las 15.15 de Argentina, mismo horario local.
“La danza con sus orígenes variados, la gran diversidad de vegetación y el fútbol, que refleja la alegría, son los tesoros que tiene Brasil”, agregó Cornez, quien no quiso dar mayores detalles de los contenidos de la fiesta.
La Fifa, en tanto, explicó que participarán 600 artistas, gimnastas y especialistas de Capoeira, acompañados por música autóctona, y confirmó que la cantante estadounidense Jennifer Lopez acompañará a su compatriota el rapero Pitbull, y a la brasileña Claudia Leitte para entonar el tema de la Copa.
Lopez no iba a ser de la partida, según anunció la Fifa días atrás por “problemas de producción”, pero hoy se confirmó su presencia para interpretar en conjunto Somos Uno (We Are One), el tema oficial del Mundial Brasil 2014.
Además, el ente rector del fútbol mundial adelantó en su página web que el elemento principal de la representación artística será “una pelota viva”, con una bola central de LED que cuenta con más de 90 mil clústeres con 7 mil nits de luminosidad y que se moverá durante los 25 minutos del espectáculo.
La ceremonia inaugural será disfrutada “in situ” por unas 65 mil personas, incluyendo a la presidenta del país, Dilma Rousseff, y otros 20 jefes de estado, pero también retransmitido televisivamente a más de 200 países.
Debido a que luego de la fiesta arrancará el primer partido del Mundial entre el seleccionado local de Brasil y Croacia, todos los ensayos realizados por los artistas estuvieron supervisados por un especialista en césped para evitar que se perjudique en la previa a la actuación de los futbolistas. “No podemos usar mucha iluminación ni fuegos artificiales, tampoco elementos puntiagudos ni muy pesados. Nuestro espectáculo se centrará en los bailes, la escenografía y la banda sonora”, señaló Joana Havelange, directora de planificación y soporte de operaciones.
En la conferencia de prensa desarrollada en el estadio Arena Corinthians también participaron Pitbull, Leitte y el músico local Joao Jorge Santos Rodrigues, de la banda de percusión Olodum, que acompañará al trío de cantantes al que se sumará JLO para la canción oficial.
El puntapié inicial del Mundial estará a cargo de un joven parapléjico que se levantará de su silla de ruedas y caminará ayudado con un exoesqueleto, una especie de vestido robótico especial desarrollado por un grupo de científicos de todo el mundo comandados por el neurocientífico brasileño Miguel Nicolelis.
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