El cónclave que elegirá al sucesor de Benedicto XVI empezó formalmente al ordenar el maestro de ceremonia la salida de la Capilla Sixtina de toda persona ajena a las votaciones y cerrarse las puertas del templo con los 115 cardenales electores dentro.
“Extra Omnes” (hombres fuera), ordenó el cardenal Guido Marini, antes de que a las 17.35 (13.35 de nuestro país) se cerraran bajo llave las puertas de la capilla y luego de que los cardenales juraran sobre los Evangelios cumplir su misión apostólica si son electos pontífice y guardar secreto sobre las votaciones que elegirán al 266 Papa de la historia de la Iglesia Católica.
Antes de encerrarse en la Sixtina, celebraron la misa votiva “Pro eligendo Pontifice”, que ofició el cardenal decano, Angelo Sodano, quien exhortó a los cardenales a “colaborar para edificar la unidad de la Iglesia” y a “cooperar con el sucesor de Pedro”
Según el esquema facilitado por el Vaticano, ya esta tarde pueden celebrar la primera votación y habrá la primera “fumata”, el humo que anuncia al mundo si hay o no papa. Si hay pontífice, es blanco y en caso contrario, negro.
El portavoz vaticano, Federico Lombardi, dijo que lo más normal es que hoy sea una “fumata negra”.
Para ser elegido Papa es necesario alcanzar dos tercios de los votos de los cardenales electores. Al ser 115, se necesitarán 77 votos.
La normativa vaticana establece que en el segundo, tercero y cuarto día se celebren dos votaciones por la mañana y dos por la tarde.
Si tras esos tres días ninguno ha alcanzado los 77 votos, se procederá a una jornada de reflexión y plegarias en la que no se votará. Después se reanudarán las votaciones para otros siete eventuales escrutinios.
Si tampoco ha salido Papa, se procederá a una nueva jornada de reflexión y después a otros eventuales siete escrutinios. Si sigue sin haber fumata blanca, habrá otra pausa de reflexión y otros siete escrutinios. Y así hasta 34.
A partir de ese momento, se votaría entre los dos cardenales más votados, pero éstos no podrán participar en la votación.
Benedicto XVI fue elegido el 19 de marzo de 2005 en la cuarta votación, Juan Pablo II el 16 de octubre de 1978 en la octava votación y Juan Pablo I el 26 de agosto de 1978 en la cuarta.
Sobre cuanto tiempo durará el cónclave, ningún cardenal se atreve a responder, aunque una gran mayoría espera que sea breve.
El cónclave se celebra sin que destaque un candidato fuerte, aunque todas las miradas están puestas en purpurados de iglesias dinámicas y jóvenes, como la africana y la latinoamericana y son muchos los que aseguran que el futuro papa no será italiano, debido al lastre del escándalo “Vatileaks”.
En estos días previos, los “papables” que más suenan son el italiano Angelo Scola, de 71 años, arzobispo de Milán; el brasileño Pedro Odilo Scherer, de 63 años, arzobispo de Sao Paulo; el canadiense Marc Ouellet, de 69 años, y el arzobispo de Boston, el capuchino Sean O’Malley.
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