“Lo que viene va a ser más duro de lo que fue la primera mitad”. La frase corresponde al entrenador de Rosario Central, Eduardo Coudet, y no hay dudas de que tiene razón no solamente por los rivales sino por la importancia de los juegos. ¿Qué es lo le viene al Canalla a partir del próximo fin de semana hasta el final del semestre? Un derrotero de encuentros que incluyen compromisos decisivos tanto por el torneo de Transición como por Copa Libertadores.
A la primera mitad Central la sorteó con éxitos; ya que cumplió con los requisitos trazados por el plantel y cuerpo técnico antes del inicio de la competencia.
Pero desde el 1º de abril comenzará una seguidilla que ya tiene enfrentamientos definidos y podría tener más si es que el Canalla juega la final del campeonato argentino (NdR: se juega el 29 de mayo) o si continúa pasando de ronda en el torneo internacional.
Hasta ahora tiene confirmados diez partidos hasta el 22 de mayo: 8 por el campeonato local y 2 por la Copa. Aunque, antes de esa fecha, podría jugar dos más por octavos de la Libertadores (NdR: se juegan entre la última semana de abril y la primera de mayo) y si pasa a cuartos tendrá como mínimo uno más antes de esa fecha (NdR: los cuartos se disputarán entre el 11 y el 18 de mayo si el rival no es mexicano; ya que si es de origen azteca la llave de cuartos se disputará entre el 18 y el 25 de ese mismo mes).
Vale recordar que la competencia internacional, producto de la Copa América, tendrá las semifinales y la final luego del torneo de selecciones.
Más visitante que local
Por el campeonato argentino, al equipo del Chacho le quedan 8 partidos. De los cuales en 7 enfrentará a rivales de la zona 1 y el restante será el juego interzonal frente a Newell’s.
De los 8, el Canalla jugará sólo 3 en condición de local: Vélez, Gimnasia y Quilmes. Mientras que los otros 5 los disputará fuera del Gigante de Arroyito: Olimpo, San Lorenzo, el Clásico, Arsenal y Belgrano.
Uno y uno en la Copa
Por el Grupo 2 de la Libertadores, al conjunto del Chacho le quedan por disputar dos encuentros: uno como local (Palmeiras) y otro como visitante (Nacional). Vale aclarar que si le gana a los brasileños el miércoles 6 de abril habrá asegurado la clasificación a octavos.
“Festejé más la amarilla de Funes Mori que los dos goles”
A fuerza de buenas actuaciones se ha convertido en una pieza clave en la columna vertebral del equipo de Eduardo Coudet. Damián Musto, el volante central canalla, habló en conferencia de prensa. Y si bien analizó el presente del equipo, lejos estuvo de ocultar la felicidad que le genera el hecho de que su amigo Javier Pinola pueda ser titular mañana cuando la selección nacional se mida ante Bolivia en el Mario Alberto Kempes.
“Festejé más la amarilla de (Ramiro) Funes Mori que los goles”, sentenció sin casete y entre risas el mediocampista auriazul. Y agregó: “Hablé con (Javier) Pinola, no tanto de lo futbolístico. Sí le dije que disfrute lo que está viviendo. Se merece jugar, estamos todos haciendo fuerzas. Es un referente, un líder del equipo que aportó muchísimo. Y hemos entablado una linda amistad. El premio de estar en la selección es por lo que hizo acá y para nosotros es un ejemplo, un orgullo”.
Luego, al ser consultado sobre si está atravesando el mejor momento de su carrera, comentó: “Me siento en un buen momento, junto a todo el equipo. Estoy con confianza. Trabajo día a día, soy un laburante. Disfruto mucho del presente del equipo, le pudimos dar una continuidad a lo que hicimos el año pasado”.
—¿Qué tan importante es que haya llegado este “mini receso”?
—El parate es importante por lo físico y por lo mental. Jugar tan seguido, por más que estés bien de la cabeza, el cuerpo lo siente. Más allá de que hemos conseguido resultados todos los partidos fueron luchados.
—En varios encuentros se ha podido ver que los volantes por afuera juegan mucho más cerrado que lo que lo hacían el año pasado. ¿Lo ves de esta manera?
—Sí. Más allá del dibujo tenemos varias formas de pararnos. Tratamos de cerrar a los volantes de afuera, cuando jugamos con un enganche clásico, para que no nos quede tan ancha la cancha y presionar lo más arriba posible.
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