Guillermo Ferretti
Arranque perfecto. El Central de Diego Cocca consiguió dos triunfos en las primeras dos presentaciones de esta Superliga. Y ganó con autoridad, evidenciando un crecimiento colectivo que genera, entre otras cosas, una imagen distante del frágil equipo de la temporada pasada. Combatividad, intensidad, compromiso y eficacia, asoman como las principales cualidades de este nuevo Central. Pero todo esto aparece respaldado desde una notable mejora física que, al menos en este inicio del torneo, transformó al Canalla en un rival competitivo.
La coyuntura obliga, la situación en la tabla de los promedios presiona. Y en este comienzo de temporada Central estuvo a la altura de las circunstancias. Sin brillar, con problemas en la generación de juego, a los auriazules de todos modos les alcanzó para imponerse en sus primeros dos compromisos de Superliga. Ante rivales muy diferentes, y también en circunstancias diferentes, el equipo de Cocca supo sortear escollos y se quedó con los 6 puntos en disputa.
Es cierto que, a simple vista, en los triunfos se potencian virtudes de los vencedores; y, a la vez, los defectos aparecen maquillados por los buenos resultados. Por esta razón, instalada dentro de la lógica futbolera, Central cosecha hoy más elogios que reproches. Y el análisis no contempla cuestiones tácticas, ni rendimientos individuales.
A la hora de apuntar cualidades, el “compromiso” colectivo, que destaca permanentemente Cocca, y el alto nivel de respuesta física que evidenció el equipo, son hoy dos factores que permiten entender la seriedad de la puesta en escena auriazul. El Central permeable del semestre pasado quedó atrás. ¿Una prueba? En la primera fecha, ante el Decano, los de Arroyito fueron los que ganaron más duelos aéreos (44) y más duelos terrestres (40). Ante la T, los canallas lograron 24 recuperaciones de balón contra 14 del rival.
¿Hay reproches? Siempre. La falta de generación de juego, reflejada en las escasas ocasiones de gol que gestó el equipo en estos partidos que jugó, es un problema a resolver. Aunque hasta ahora, este defecto quedó disimulado por la alta eficacia que mostró, ya que en las pocas situaciones que dispuso, marcó tres goles.
El equipo de Cocca empezó esta Superliga de manera ideal en cuanto a los resultados. Y hasta acá respalda los puntos obtenidos en cancha con la seriedad de la propuesta futbolística. Pero esta historia recién arranca. Potenciar lo bueno y atacar los defectos, por allí pasará ahora la difícil tarea del DT. Algo indispensable para que Central siga transitando este camino, que es el que seguramente le permitirá escapar, de a poco, de la incómoda posición que tiene en la tabla de los promedios.
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