El seleccionado argentino de fútbol realizó esta mañana un trabajo liviano antes de compartir un asado en el predio Cidade do Galo, de la localidad de Vespasiano, donde se entrenó a puertas cerradas con guardia de hinchas y cronistas.
El entrenamiento entregó muy poco para analizar en relación al posible equipo que presentará Argentina en la semifinal del miércoles próximo con Holanda, en el Arena Corinthians de San Pablo.
Como sucede desde el comienzo de la fase final del Mundial Brasil 2014, los habituales titulares cumplieron con ejercicios de estiramiento y luego realizaron un fútbol-tenis recreativo.
El capitán Lionel Messi presenció la segunda mitad de la sesión sentado en la tribuna lateral del campo de entrenamiento junto a integrantes de la delegación argentina.
Mientras transcurría la práctica, en otro sector del complejo, empleados de AFA acondicionaban dos gazebos con una larga mesa para compartir un asado por segunda vez desde que los jugadores se instalaron en Brasil.
La primera vez ocurrió el viernes 27 de junio con motivo del cumpleaños del defensor Hugo Campagnaro, dos días más tarde de vencer a Nigeria (3-2) en Porto Alegre y lograr la clasificación a octavos de final con puntaje ideal.
El plantel viajará mañana a San Pablo a las 11 en vuelo chárter y desde las 18.30 hasta las 19.30 realizará el reconocimiento del campo de juego en el Itaquerao, antes de que Sabella brinde la conferencia de prensa obligatoria en la previa de cada compromiso.
Argentina y Holanda jugarán el miércoles a las 17 en el Arena Corinthians por un lugar en la final, que se disputará el domingo próximo en Río de Janeiro con el ganador de Brasil-Alemania.
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