Docentes de Amsafé Rosario y estatales de ATE volvieron a marcar este martes el pulso de la pelea gremial en una protesta de la que la tercera pata convocante, los profesionales universitario de la salud agremiados en Siprus, se bajó formalmente al acatar el dictado de una conciliación obligatoria por parte del Ministerio de Trabajo de la provincia. De igual modo, junto a los demás trabajadores estatales tienen una agenda única y que mira a la Casa Gris: rechazo total al pago escalonado de haberes, reapertura de paritarias para tratar “en forma urgente” un aumento de salarios, el pase a planta del personal precarizado con contratos y un salario de emergencia para reemplazantes.
ATE y Amsafé cortaron durante la mañana el tránsito en Laprida a la altura de Santa Fe para montar una olla popular, a la par que se organizó una caravana entre la delegación local del Ministerio de Trabajo, en Ovidio Lagos y San Lorenzo, hasta la sede de Gobernación, frente a la plaza San Martín. Las protestas se enmarcan en una “retención de tareas” lanzada por ATE para este martes 7 y miércoles 8 en toda la provincia, sin asistencia a los lugares de trabajo y sólo manteniendo guardias mínimas en servicios esenciales por “incumplimiento del Estado”. La protesta se replicó en Santa Fe capital con una movilización a la plaza del Soldado Argentino, en Mendoza y San Jerónimo a pocas cuadras de la Municipalidad local.
En tanto, en la docencia se cumple en las dos jornadas previas al Día de la Independencia por parte del gremio público y también de Sadop, el Sindicato de Docentes Privados, en rechazo al cronograma de pagos del gobierno provincial y tras una protesta y medida de fuerza días atrás en reclamo de apertura de paritarias para discutir salarios.
“La medida, enmarcada en la figura de «retención del crédito laboral», rechaza el pago de salarios a través de un cronograma que llega hasta el 17 de julio, y se da tras el pedido para discutir salarios”, explicaron desde ambos sindicatos.
Y recordaron que las paritarias del sector “fueron suspendidas a mediados de marzo por el inicio del aislamiento social dispuesto para mitigar y contener los contagios de coronavirus”.
Con la medida de fuerza, agregaron los gremios del magisterio y profesorado, “concluirá el primer cuatrimestre, ya que los dos días de protesta se juntarán con los feriados nacionales del jueves 9 y el viernes 10 en conmemoración de la Declaración de la Independencia”.
La última semana, los docentes habían realizado un “apagón educativo” durante dos jornadas y no estuvieron disponibles para impartir contenidos a distancia a sus alumnos, en reclamo de la apertura de paritarias.
Para enojo de los docentes, semanas atrás se reiniciaron los encuentros en torno a la mesa paritaria, “pero se trató específicamente de avanzar en el retorno progresivo de las clases presenciales, sin hablar de aumentos salariales ni condiciones de trabajo”. En ese marco, el secretario General de Amsafé Capital, Rodrigo Alonso, consideró “inadmisible” que los docentes no hayan obtenido un reconocimiento por su labor durante la pandemia, cuando “trabajan el doble”, por lo que reiteró el pedido al gobierno provincial de un “aumento de emergencia”, además de la reapertura de la mesa salarial.
En tanto, en el sector Salud, la cartera laboral dictó la conciliación obligatoria en el conflicto del atraso en el cronograma de pagos y convocó a una audiencia que se cumplió ayer, sin avances sustanciales. “Desde Siprus rechazamos cualquier intento de acallar nuestros reclamos y no aceptamos que el Ministerio de Trabajo (que es juez y parte) pretenda restringir nuestro derecho a la protesta. Entendemos que es este Ministerio, junto al de Salud, el que está incumpliendo la ley al no convocar a negociación paritaria y cuando convocó a una única comisión técnica, nuestra organización gremial que es mayoritaria entre los profesionales de la salud no fue invitada”, se quejó el gremio.
Con todo, la medida dispuesta y acatada por Siprus dejó “en suspenso” el cese de tareas, pero todo indicaba que por una sola jornada: este miércoles se concretará. Y de igual modo la “Caravana por la Salud Pública”, en el marco de la protesta intersindical se mantuvo, protagonizada por delegados y dirigentes del gremio.
La misma actitud tuvo el Sindicato de Médicos: Amra se había sumado al cese de actividades con similares reclamos, pese a no convocar a las protestas en la calle de los demás gremios. Y también acató la conciliación obligatoria dictada por el gobierno provincial, aunque denostaron la medida.
“La decisión se tomó a los efectos de cumplir con los procesos legales aún cuando, contradictoriamente, desde el Poder Ejecutivo se envía la señal inversa, queriendo que los trabajadores no realicen acciones de lucha, pese a que el empleador no abona los sueldos en las fechas legales establecidas”, lamentaron en el gremio.
“A su vez remarcamos –agregó el sindicato– que se ha dejado sentado en oportunidad de conflicto anterior que, al día de la fecha, nunca se ha constituido (claro incumplimiento de parte del Estado provincial) la mesa de conciliación de conflictos que estableció la ley 13.042, a pesar de los reiterados pedidos de parte de la Amra y de los innumerables proyectos elevados a tales fines”.
Y en ese marco, los médicos dejaron sentado: “No compartimos que resulte estéril la discusión sobre la fecha en que los trabajadores dependientes de la provincia de Santa Fe deban percibir sus haberes; de lo contrario estaríamos consintiendo cualquier tipo de arbitrariedad y el pago de salarios en cualquier fecha: ello es sencillamente inadmisible”.
“Es cierto que los trabajadores profesionales de la salud son esenciales durante esta triste pandemia, no obstante no lo considera así la provincia de Santa Fe, de lo contrario respetaría la fecha en que deben percibir sus haberes”, remarcó Amra, recordando que la medida de fuerza se resolvió “por incumplimiento en el pago de los haberes”; que ha ocurrido entre los afiliados “no sólo casos de contagio de coronavirus Covid-19, sino también distintas afecciones a la salud tanto psíquica como física”, y que “incumplimientos” por parte de la provincia como el que denuncian “no hacen más que generar un sentimiento de zozobra y malestar en el trabajador profesional de la salud”.
mio
Comentarios