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Amenazas de Baldomir a la prensa en el primer día del juicio

El ex campeón mundial de boxeo está acusado de abuso sexual contra su hija. En la primera audiencia del juicio oral y público, hizo gestos amenazantes a la prensa. Su actual pareja lo justificó: “A los periodistas te dan ganas de matarlos uno por uno”. Repudio de la Asociación de Prensa de Santa Fe.


Los gestos de Baldomir para la prensa. Foto: gentileza José Busiemi, UNO de Santa Fe.

La primera jornada del juicio oral y público contra el ex boxeador santafesino Carlos Baldomir, acusado de delitos contra la integridad sexual de su hija menor, empezó mal. Apenas ingresó a la audiencia, hizo gestos amenazantes contra la prensa dando a entender que habían hablado mal de él en los medios. Su actual pareja justificó los gestos mientras que la Asociación de Prensa de Santa Fe (APSF) emitió un comunicado manifestando su repudio.

Baldomir, de 48 años y ex campeón mundial en 2006, es juzgado como autor de delitos contra la integridad sexual de su hija menor de edad, cometidos en las ciudades de Santa Fe y de Junín, provincia de Buenos Aires.

Los fiscales que representan al Ministerio Público de la Acusación (MPA), Alejandra Del Río Ayala y Federico Grimberg, solicitaron una condena de 20 años de prisión para el acusado, quien está detenido desde 2016.

Al ex boxeador se lo sindica como autor de los delitos de abuso sexual con acceso carnal calificado, abuso sexual gravemente ultrajante (ambos delitos calificados por ser el imputado ascendiente de la víctima y por la convivencia preexistente con una víctima menor de 18 años) y promoción a la corrupción de menores.

Al ingresar a la primera audiencia, antes de sentarse, Baldomir miró a los periodistas, levantó su dedo del medio, les hizo el gesto de fuck you y luego continuó gesticulando: se puso “en guardia” como en una pelea dando a entender que iba a golpear a quienes hablaron de él en los medios.

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Su actual pareja, Laura, dijo ante la prensa que el gesto “fue para los periodistas que hacen dos años y ocho meses están hablando cualquier cosa. Antes que los jueces, lo condenaron los periodistas. Es decir, todo este tiempo te tienen encerrado por algo que no hiciste. Eso no requiere explicación, te dan ganas de matarlos uno por uno, lo mínimo que uno tiene es bronca”.

Luego del episodio, el gremio de prensa emitió un comunicado en el cual “rechaza los gestos amenazantes del ex boxeador Carlos Baldomir hacia los trabajadores y trabajadoras de prensa presentes en la Sala I del subsuelo de Tribunales de la capital provincial, donde se llevaba a cabo el juicio oral contra el ex campeón del mundo de boxeo”.

“La Asociación de Prensa de Santa Fe reitera su rechazo a estas intimidaciones, se solidariza con los trabajadores y las trabajadoras amenazados y se expresa en defensa del libre ejercicio de la tarea periodística”, indicó el comunicado.

El juicio

En el proceso se investigan los abusos cometidos por el ex boxeador en perjuicio de su hija. “Los ilícitos comenzaron cuando la víctima estaba en edad escolar y se reiteraron en múltiples oportunidades”, precisó la fiscal Del Río Ayala en la primera jornada. Y añadió que “algunas de las agresiones sexuales fueron perpetradas en el domicilio familiar que compartían la víctima y el acusado y en el que también vivían los hermanos de la niña y la madre, quien era su pareja”.

Por su parte, el fiscal Grimberg manifestó que Baldomir “también abusó de su hija cuando se trasladaba en automóvil con ella. Le pedía que se sentara en el asiento del acompañante y la obligaba a tener conductas de índole sexual”. En este sentido, el funcionario del MPA agregó que “estas agresiones también ocurrieron en reiteradas ocasiones”.

“Los abusos no sólo fueron cometidos en la ciudad de Santa Fe, sino también en una vivienda de la ciudad de Junín (provincia de Buenos Aires) donde residía temporalmente el acusado y en ocasiones en que la víctima concurrió a visitarlo”, indicó Del Río Ayala. Añadió que “en los veranos de 2012 y 2013, durante el transcurso de estas visitas, aprovechaba los momentos en los que compartía la cama con la niña o cuando el resto de la familia estaba durmiendo para perpetrar las agresiones sexuales”.

“También fue acusado de abusar de su hija en febrero de 2014, en una ocasión en la que junto a otros familiares concurrieron a una cena en un comedor de la localidad de Sauce Viejo. Cuando regresaban en automóvil luego de cenar y mientras conducía el hijo del acusado, se ubicó en el asiento trasero junto a la niña y cometió los ilícitos”.

Secuestro de un celular

El domingo 22, personal del Servicio Penitenciario secuestró un teléfono celular que utilizó el detenido para enviar un mensaje, desde la prisión a una testigo clave de la Fiscalía, quien deberá declarar en el juicio.

Tras el secuestro del celular, los investigadores detectaron que el ex boxeador le envió mensajes no sólo a esa testigo sino que también hizo lo mismo con otras tres personas, dos de ellas también testigos de la causa. Esos mensajes, según indicaron fuentes judiciales, habrían tenido la intención de influenciar a los testigos sobre “cómo deberían declarar en el juicio”.

Las audiencias

Durante la primera jornada del debate oral tuvieron lugar los alegatos de apertura de las partes y las primeras declaraciones de testigos. El viernes 26 continuarán las declaraciones testimoniales mientras que el lunes 29 se llevarán a cabo los alegatos de clausura. Finalmente, la lectura de la sentencia está prevista para el miércoles 31 a las 11.

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