En un fin de año en el que el futuro del cine argentino se ve negro después de que las autoridades del Incaa manifestaron que no disponen de fondos para atender solicitudes de créditos para la realización de películas hasta 2019, hecho que puso a gran parte de los trabajadores de la industria en estado de alerta, las películas nacionales que se produjeron en tiempos pasados siguen demostrando su calidad y triunfando en prestigiosos festivales. El sábado por la noche se entregaron los premios de la edición número 39 del Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana y Alanis, de Anahí Berneri, fue la gran triunfadora al cosechar el Coral al mejor largometraje de ficción.
El film tuvo también un exitoso paso por el Festival de San Sebastián, donde fueron premiadas su directora y su protagonista, Sofía Gala Castiglione.
La intérprete argentina también recibió el Coral a la mejor actriz, junto con la transexual chilena Daniela Vega, protagonista de Una mujer fantástica, del director Sebastián Lelio, título que además conquistó el premio especial del jurado.
En total, en esta edición, compitieron 94 películas en sus distintas categorías, de las más de 404, entre largos y cortometrajes, que fueron proyectadas en la capital cubana desde el 8 de diciembre, siempre con un público formado y caluroso.
Por otro lado, la también argentina Lucrecia Martel recibió el galardón como mejor dirección por Zama, que se alzó también con el Premio Fipresci de la crítica internacional y los Corales de mejor sonido (Guido Berenblum) y dirección artística (Renata Pinheiro).
Para la Argentina fue también el premio al mejor guión, que distinguió a Pablo Giorgelli y María Laura Gargarella por Invisible, mientras que como mejor actor se coronó el dominicano Jean Jean por Carpinteros.
Finalmente, la prestigiosa realizadora mexicana María Novaro recibió el premio a la edición por Tesoros, su compatriota María Secco el de fotografía por Restos de viento y el grupo brasileño O Grivo se llevó el de mejor música original por Joaquim.
Además, como mejor ópera prima fue distinguida la argentina La novia del desierto, de Valeria Pivaro y María Cecilia Atán, mientras que el drama colombiano Matar a Jesús, de la también debutante Laura Mora, se llevó un galardón especial en esa categoría. Finalmente, el premio del público fue para la cubana Sergio & Serguei, de Ernesto Daranas, que trata con sensibilidad la amistad entre un radioaficionado cubano y un cosmonauta soviético en momentos de la desintegración de la URSS.
En su discurso de clausura, el director del Festival, Iván Giroud, subrayó que la presente edición marcó el inicio de “una nueva época” por la calidad de las obras y, según anunció, la edición número 40 del certamen estará dedicada al cineasta cubano Tomás Gutiérrez Alea (1928-1996).
